El concejal de la Unión Cívica Radical, Javier Pérez, pretende que se abra un paréntesis de 45 días para otorgar habilitaciones a bares, boliches, confiterías bailables o locales similares, para estudiar exhaustivamente caso por caso, a fin de desalentar la eventual apertura de whiskerías, cabarets o prostíbulos disfrazados bajo otras figuras.
Los prostíbulos están prohibidos desde hace décadas, pero la ley nunca se cumplió. Recién ahora, con la inminente aplicación de la nueva Ley Contra la Trata impulsada por el gobernador José Manuel de la Sota, se habla de que se erradicarán totalmente los prostíbulos de la provincia de Córdoba.
Villa Nueva fue una adelantada en ese sentido, ya que sancionó una ordenanza de esta naturaleza en 2010.
Sin embargo, Pérez advirtió su “enorme” preocupación porque dijo estar al tanto de “una cantidad importante de averiguaciones” de interesados en abrir locales de este rubro. Ante esto, el edil le planteó el tema a la concejala radical villamariense, Nora Landart, a la presidenta del Deliberante villanovense, Graciela Isaguirre, y al concejal justicialista Luis Navarro. Todas fueron conversaciones informales que tranquilizaron a Pérez, quien cree que se plegarán a la iniciativa.
“Si bien sabemos que hay una ley provincial y que nosotros fuimos unos adelantados porque incluso fuimos mucho más allá, ya que lo desechamos de la tarifaria, o sea, somos pioneros en la provincia, temo que disfracen los locales”, explicó a EL DIARIO.
“Villa María tiene la capacidad de poder controlar, tiene más agentes y recursos de personal y económicos. Nuestro municipio, en cambio, presenta limitaciones, no sólo económicas. La gente que controla boliches también debe controlar durante el día el tránsito. No nos alcanza. Mi temor es que quienes están en este rubro vengan a la ciudad”, expuso.
“Si bien está legislado, hay que ejecutarlo para que no sea sólo una ordenanza bonita para la foto”, argumentó.
“Pido un tiempo para que veamos la posibilidad de estudiar cada caso, asesorándonos y tratar de perfeccionar las normas para que no haya ningún agujero que los lleve a abrir algo disfrazado”, declaró. “Las normas deben ser claras y que no se esconda nada detrás de ello, porque todos sabemos que hecha la ley hecha la trampa”, subrayó y advirtió que “este negocio mueve mucho dinero y pertenece a gente acostumbrada a vivir de eso”.
Pérez hizo hincapié en averiguaciones que se realizaron en el camino que va hacia Sanabria y que escapa a la jurisdicción de la ciudad. “Hay una zona gris allí, donde tendrá que actuar la provincia, pero también hubo averiguaciones en barrio La Floresta”, reveló.