“Cómo puede ser que hace un año el municipio quisiera pedir prestado un millón de pesos al de Villa María...”, “cómo puede ser que los trabajadores cobren el sueldo desdoblado con cheques a julio y agosto...”, “¿cómo puede ser?... y ahora pagamos 742 mil pesos a un tercero para que realicen una cobranza que no hicieron, siendo tarea indelegable del Gobierno, si con ese dinero hasta se podría comprar un camión para riego o sanear otras necesidades, como insumos en el Hospital para los vecinos”.
Estos son algunos de los cuestionamientos que lanzaron desde la Unión Cívica Radical (UCR), respecto al pago que la Municipalidad de Villa Nueva (que se encuentra en emergencia económica), habría abonado ayer a la Fundación de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) por la implementación del Programa de Fortalecimiento de la Administración Pública Municipal (Profam).
Se trata, según lo estipulado en el convenio firmado por las partes, del 25% de lo recaudado en concepto de los diferentes tributos que los ciudadanos realizan al municipio (por tasas y servicios). La recaudación de ese mes habría alcanzado los 2.970.134,64 pesos, tal el porcentaje que arrojan los 742.533,66 pesos a pagar.
La orden de pago correspondiente ingresada al Tribunal de Cuentas tuvo el inmediato rechazo de su presidente, Ignacio Tagni (UCR), que cuestionó la cifra “para el mes de mayo”, pero además se quejó porque “es una tarea que debe realizar un área del municipio a cargo del Ejecutivo, ese es el planteo”, aclaró.
De todas maneras, admitió que el convenio fue rubricado tras la aprobación por mayoría en el Concejo Deliberante, aunque sin el voto de los ediles del radicalismo.
“Además la Ordenanza fue promulgada el 24 de mayo, por lo que se ha implementado con anterioridad y eso también está mal”, dijo Tagni.
La concejala Nora Bizzutti fue más allá, ya que entiende que “lo que pagan los vecinos, por ejemplo, por pavimento y lo que aporta el Gobierno nacional, buena parte se va en el pago a la Fundación de la Universidad”. En ese punto agregó la preocupación que “buena parte de esta obra recién se comienza a pagar, por lo tanto asegura una recaudación para el gestor de la cobranza, y si a los 742 mil lo calculamos a 24 meses, lo que dura el convenio, la Municipalidad pierde de ingresar a sus arcas más de 17 millones de pesos”.
“Cada deuda que se acumula o vence es recurso que no ingresa. Es un error del propio Ejecutivo”, sentenciaron. Por último, Bizzutti expresó que “es una locura lo que nos cuesta esta cobranza a los villanovenses, que es tarea indelegable del Gobierno, para eso los eligió el ciudadano”.