La disposición final de la basura es un tema difícil de resolver para la mayoría de las ciudades. En Villa María, actualmente se realiza en el predio del basural el enterramiento en un vertedero controlado a cargo de la empresa Innviron (ver nota aparte en la página 5), mientras que en el mismo sitio, la Cooperativa 7 de Febrero, integrada por las trabajadoras despedidas de la empresa Corbam, separan y comercializan los reciclables.
Desde la entidad cooperativa elaboraron un proyecto que será presentado la semana próxima ante la Municipalidad, para que sea considerado por el Ejecutivo.
Consiste fundamentalmente en la propuesta de hacerse cargo del enterramiento de los RSU en el vertedero controlado, además de continuar con el tratamiento del material reciclable.
La Cooperativa garantiza “la logística que posibilite el normal y continuo funcionamiento de la planta de separación, incluyendo operaciones de mantenimiento de las instalaciones y maquinarias existentes”, indican desde la entidad presidida por Marcela Durán.
Sería, en definitiva, hacer lo que se está haciendo ahora, pero bien. Pero además, en el proyecto hay un valor agregado, cuál es el énfasis que pondrán en la separación domiciliaria de los RSU.
Para ello, trabajarán con las escuelas primarias, conformando cooperativas escolares con la finalidad de que los chicos puedan hacer bolsas de colores para la separación de la basura y para que, paralelamente, se incorpore la educación cooperativa desde la práctica.
En el proyecto al que tuvo acceso EL DIARIO, la Cooperativa indica que está en condiciones de seleccionar hasta 8 toneladas diarias de reciclables, con lo que disminuiría el volumen de lo enterrado en el vertedero.
Tienen la capacidad de enterrar hasta 100 toneladas diarias de RSU y garantizan “las operaciones necesarias para la correcta gestión del vertedero controlado” .
En el proyecto incluyen también otros puntos a cumplimentar:
-Control de la evaluación de los parámetros de calidad del agua y del aire, los que serán informados a la Municipalidad de Villa María.
-Transferencia del descarte de la planta de separación hasta el vertedero controlado.
-Desarrollo de un plan de concientización y educación en cuanto a la implementación de la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (GIRSU).
Además, garantizan la limpieza del predio, para que no continúe siendo un espacio contaminante como es en la actualidad.

Diferencias con otras propuestas

Al conocer el proyecto de la Cooperativa, aparecen claras diferencias con los proyectos anteriores presentados para el tratamiento y disposición final de los RSU.
En primer lugar, está elaborado por gente de la ciudad que viene trabajando desde hace seis años en el tema.
En segundo lugar, está fundado en el concepto ambiental que funciona en el mundo desarrollado, es decir, partiendo de la separación en origen.
Y finalmente, está enmarcado en un proceso social para mejorar la calidad de trabajo de las socias de la Cooperativa y para involucrar a la comunidad a través de las escuelas. En definitiva, una alternativa potable que tendrá el intendente en su mesa para analizar.