En las escuelas secundarias de Villa María alejadas de la zona céntrica no hay problemas de ausentismo los días viernes. Las faltas o los problemas de atención en clases ese día son una de las razones por las cuales los concejales sancionarán una ordenanza que prohibirá a menores de 18 años ingresar a boliches cuando al día siguiente tienen clases.
Días atrás, los ediles recibieron a integrantes del cuerpo directivo de las escuelas IPEM 275 ex Nacional y Manuel Anselmo Ocampo. Desde el Deliberante siempre se dijo que desde las escuelas se pidieron medidas ante la preocupación por lo que ocurre los viernes, ya que los jueves muchos chicos concurren a una disco de la costanera.
En el Vera Peñaloza de Las Playas y en el Abraham Juárez del barrio San Martín no existen estos problemas, según confirmaron ayer sus directores, Graciela Olmos y Henry Calvo, respectivamente, al ser consultados por EL DIARIO.
No obstante, ambos docentes avalaron la sanción de la norma legislativa, aunque con matices distintos.
Calvo dijo no gustarle la palabra ni la acción de prohibir, sino que habló de mayores controles.
“A lo mejor no podrán ir a un boliche pero se juntarán a tomar en una casa, en un patio o donde sea. El problema es el alcohol, no el lugar”, enfatizó el directivo.
“El trabajo debe ser más profundo: hay que concientizar que no hay que consumir alcohol, independientemente de si es un boliche o una casa”, resaltó.
Calvo se preguntó cómo se controlará el tema una vez que la norma entre en vigencia. Y dijo que “el compromiso es de todos”.
“Esta ordenanza, tomada como inicio de algo, es positiva, me parece buena, pero no hay que quedarse sólo con eso. Hay que trabajar el tema en las escuelas, concientizar, comprometernos”, declaró.
“Los jóvenes están muy involucrados desde el Concejo Deliberante Estudiantil”, resaltó.
El directivo del Ipem Abraham Juárez confirmó que no tienen problemas de ausentismo ni de conducta los días viernes a consecuencia de una eventual salida de los alumnos durante la noche del jueves. “Este año sólo tuvimos un inconveniente con un chico, que no estaba alcoholizado, sino medio dormido”, develó.
Por su lado, Graciela Olmos consideró “positiva” la casi segura aprobación de la ordenanza y sostuvo que el Estado “debe aparecer ante la ausencia de los padres”.
“El Estado debe atender situaciones de los adolescentes y jóvenes cuando los padres no intervienen y el alcoholismo es una situación que lo amerita”, afirmó.
Contó que en el establecimiento que dirige no hay problemas los días viernes. “La problemática se presentó hace mucho; hace cinco años que no tenemos problemas”, aclaró.
“Creo que en muchas familias los padres tienen desdibujado el rol y por eso actúa el Estado. Yo noto la problemática del alcohol en la sociedad y está claro que se cometen acciones bajo los efectos del mismo que no se cometerían si no estuviesen alcoholizados”, explicó.
Olmos precisó que en la escuela que dirige se realizan charlas sobre esta temática.