Por medio de un comunicado de prensa firmado por el delegado gremial Mario Lanzone, los trabajadores de la agencia PAMI Villa María, que se encuentran agrupados en la Unión de Trabajadores del Instituto (UTI) y en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), dieron a conocer la resolución de adoptar el estado de alerta y movilización, hecho que abarca, además, al resto de las delegaciones de todo el territorio nacional.
La protesta se origina en base a las reiteradas complicaciones que deben soportar los empleados del PAMI durante el mes en curso por parte de las autoridades del Instituto, en el marco de las negociaciones paritarias.
Según los empleados, tantos “palos en la rueda” han impedido concretar los más importantes logros en referencia al sistema de carrera, antigüedad y a la recomposición salarial, lo que generó un estancamiento en una negociación que venía siendo fructífera y que podría haber terminado de manera exitosa.
Además, el personal indicó que, como es de público conocimiento, siempre elevó sus reclamos por las prestaciones, la permanencia de la dependencia en la ciudad y la continuidad de los distintos programas, teniendo como prioridad absoluta el bienestar de sus afiliados.
Es por eso que actualmente, sin dejar de lado su lucha, consideran justo su reclamo, ya que están convencidos de haberse puesto a la altura de las exigencias que les fueron impuestas y consideran que es momento de obtener lo que ellos estiman meritorio. Al mismo tiempo, advirtieron que se verán obligados a iniciar medidas de acción directa, algo a lo que no quieren llegar para no perjudicar a jubilados y pensionados, de no llegar a buen puerto las tratativas.