Un verdadero honor a la amistad cultivan desde hace siete décadas Teresa Jorggi y Nélida Bertilotti.
Un lazo inquebrantable que consideramos pertinente compartir precisamente hoy, en la celebración del "Día del Amigo".
Lejos de la realidad actual, los amigos virtuales que se pueden acumular por centenares en las redes sociales y cerca de aquellos que abonan la amistad con gestos cotidianos, nuestras entrevistadas nos dan una lección de vida.
Cuando pequeñas y acompañando a sus mamás que como buenas vecinas se reunían a conversar, Teresa y "Chiquita" comenzaron a cimentar una relación que el tiempo no pudo hacer claudicar.
"Nuestra amistad creció al amparo de nuestras madres. Los primeros recuerdos que tengo de ella era vernos cuando nos cruzábamos para ir a la escuela", señaló Teresa en diálogo con EL DIARIO.
Paradójicamente, ambas protagonistas de nuestra historia no compartieron su formación educativa ya que fueron a distintas escuelas primarias y secundarias de la ciudad.
Sin embargo, aquellos encuentros vecinales sirvieron de disparador para que en la juventud y la adultez, en la iglesia "Nuestra Señora de Luján" donde las dos integraron comisiones organizativas, la amistad empezara a consolidarse.
Otro de los detalles que unió más a las inseparables amigas fue la elección de la docencia como medio de vida. Teresa se recibió de maestra de grado y educadora de adultos, mientras que Nélida hizo lo propio pero como profesora de Artes Plásticas (llegó a ser directora de la Escuela de Bellas Artes).
"Todo fue profundizándose de tal forma que cuando yo salía de trabajar pasaba por la casa de ella para ver cómo estaba o simplemente para dialogar y ponernos al día", manifestó Teresa.
"Hemos compartido tantas cosas de nuestras vidas, las buenas y las malas, porque allí se pone a prueba la amistad también", agregó.
"Admiro de ella su capacidad, su bondad y su inteligencia. Admirar en el otro sus virtudes, creo que es clave para sostener al amigo por siempre", destacó la reporteada.
"Yo digo que la amistad tiene una magia. La magia de la sinceridad, la bondad, el compromiso del apoyo incondicional y el respeto por esa persona que elegimos querer amistosamente", enfatizó Jorggi.
"El rigor del invierno y de los años nos quita vigor pero no las ganas de seguir encontrándonos", dice entre sonrisas Teresa que cena o almuerza con su amiga una o dos veces al mes.
"Algo que me parece extraño es que cuando las personas llegan a viejas, las amistades se deshacen por distintos motivos. Con Nélida no nos ha pasado lo mismo y hasta tengo la suerte de poder compartir con ella el pan de la mesa", indicó.
En la actualidad, "Chiquita" está internada por una afección que aunque menor no deja de preocupar a "Tere".
"Ella está bien y seguramente esta noche me voy a enterar como está", resalta dejando claro que no ha dejado pasar una jornada sin enterarse del estado de salud de su compañera.
"Para mí la amistad es lo mejor y seguir teniendo a mi amiga de siempre es un presente que me hace la vida", redondeó.
“Lo bueno de esta profunda amistad que tengo es que no dejo de sentir que me enriquezco cada vez que nos vemos. La vida nos juntó y eso creo debemos agradecer diariamente”, concluyó.