Según informaron docentes del ente educativo, la temática fue impuesta por pedido de los propios alumnos, quienes entendieron que existe mucha desinformación en la sociedad villamariense acerca de las consecuencias y peligros que puede generar tanto para la salud (muchos trastornos físicos), como para el medio ambiente (una sola lámpara rota está comprobado que contamina 190 mil litros de agua) la rotura de este tipo de artefactos luminosos, que en su interior contienen vapor de mercurio, una sustancia muy contaminante y nociva.
Actualmente los estudiantes exponen su trabajo en la muestra institucional de ciencias que se desarrolla en las instalaciones de la escuela y próximamente lo harán en la feria zonal que se llevará a cabo en la Escuela José Mármol durante agosto.
El primer paso de la campaña es repartir folletos a la sociedad para advertirla sobre las posibles consecuencias, medida a la que se sumó cordialmente Antonela Vagliente, estudiante de desarrollo ambiental en la UNVM, quien dará charlas a los niños de la institución y colaborará con la impresión de algunos folletos.
“El sueño de los niños es lograr que en la ciudad se reciclen estas lámparas, sin esperar que primero se haga en otra parte del país”, indicó Adriana Marino, docente de la Escuela Ameghino.