Hace un mes, a raíz de una nota de EL DIARIO, los trabajadores de Cotreco que a diario recogen la basura de la ciudad, decidieron colaborar con las campañas solidarias que buscan fondos a partir de la venta de las tapitas de plástico. “Quiénes si no nosotros, estamos en contacto con casi todas las tapas que se desechan en Villa María”, dijo Cristian Cabral, representante del gremio que los nuclea (Surrbac).
Pacientemente, los trabajadores que de por sí tienen una dura tarea, decidieron sumar un esfuerzo más y cuando se encontraban una tapita, la separaban. A un mes de aquel comienzo, llenaron unas siete bolsas de arpillera con capacidad de 50 kilos cada una y decidieron donarla a la causa de Martina Saúl, la niña cuya mamá está reuniendo dinero para poder tratarla en China por su parálisis cerebral.
La familia debe reunir 50 mil dólares antes de fines de año para alcanzar a cubrir el costo del tratamiento y el viaje.
Quienes deseen continuar ayudando, pueden concurrir a Tucumán 1259, Villa Nueva, o llamar al teléfono 154225629.

Muchas voluntades

Cabe señalar que pese a lo inalcanzable que parece la cifra que requiere Martina, hay esperanzas porque así como los trabajadores de Cotreco sumaron su esfuerzo para ayudarla, así lo hicieron otras instituciones, entre ellas, varias escuelas que hicieron fuertes campañas recolectando tapitas.
La ayuda que más conmovió fue la que aportaron los papás de Matías Barea, el niño que padecía de leucomalacia periventricular y falleció, por lo que ellos donaron todo el dinero obtenido en la campaña que habían emprendido para que la recibiera Martina.