"Creemos que debemos respaldar el proyecto nacional que lleva adelante el Gobierno de Cristina Fernández, que encabeza un gobierno en disputa, que intentan jaquear las corporaciones enroladas en la derecha golpista, que no ceja en su intento desestabilizante, defendiendo los privilegios de ciertas clases sociales en detrimento de las mayorías trabajadoras, de los pobres y de los que, aún hoy, no logran salir de la exclusión a que los condenó la década menemista y el fracaso del Gobierno de la Alianza", explicó la villamariense Zulema Hernández, al detallar los lineamientos del Partido Solidario, que abrió su sede en la ciudad de Córdoba el pasado martes.
El local está en Balcarce 136 de la ciudad capital y el acto fue encabezado por sus referentes provinciales: el economista Eduardo González Olguín, el médico sanitarista Ricardo Visani (actual director del Hospital de Urgencias) y Daniel Koifman, del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos.
Cabe destacar la presencia de funcionarios de la Municipalidad de Córdoba, con el intendente Daniel Giacomino a la cabeza, quien cerró el acto reconociendo, implícitamente, al Partido Solidario como integrante del Frente Cívico, en la corriente denominada Convergencia y Participación, de la que él mismo forma parte.
"Esta vertiente -dijo Hernández- expresa una clara diferenciación con la posición adoptada por Luis Juez, en relación a sus nuevos alineamientos políticos, tal como lo expresaran cada uno de los dirigentes que hicieron uso de la palabra".

Una construcción horizontal

El advenimiento de este nuevo espacio, cuyo referente a nivel nacional es Carlos Heller, presidente del Banco Credicoop, "señala claramente la posibilidad de pensar la política con autonomía individual y colectiva. Asimismo, propone un modelo de construcción desde una perspectiva superadora, que dé por tierra con lo que ha caracterizado a los partidos tradicionales, sujetos a una estructura piramidal, donde los de arriba deciden, y los de abajo no opinan, sino que acatan. Se propone una construcción horizontal, participativa, con debate de ideas, entendiendo a la política como la herramienta más noble y digna de transformación social. Una construcción que posibilite la multiplicación de los liderazgos, y que estos cuenten con la legitimación que da el reconocimiento y la representación social", opinó la legisladora con mandato cumplido.
"Pero está claro que ningún proyecto político se llevará a cabo sin la activa participación popular. La Historia demuestra que el iluminismo político lleva implícito el fracaso, afectando siempre y en primer lugar a los sectores sociales mas desprotegidos, tanto desde el punto de vista sanitario, educativo, laboral, de la justicia, de la información. Esto los hace particularmente vulnerables. "El peor analfabetismo es el analfabetismo político", decía Bertold Brecht. Y tenía razón. "Al que no sabe cualquiera lo engaña y al que no tiene, cualquiera lo compra" decía Simón Rodríguez, maestro de Simón Bolívar. Y también tenía razón", concluyó la dirigente local.