Tal como sucedió en Villa María (ver página 5), la ciudad de Villa Nueva también homenajeó en la jornada de ayer a la República de Bolivia en el aniversario número 187 de su independencia.
La ceremonia, que se desarrolló en la escuela que lleva el nombre de dicho país, contó con un buen marco de asistentes y de representantes de diferentes instituciones. Directivos de otros centros educativos de ambas “villas”, miembros del municipio villanovense, Bomberos Voluntarios y el Centro Comercial de dicha ciudad, el grupo de scouts del padre Hugo Salvato y la comunidad boliviana de Villa María y la región enviaron a sus representantes al acto que dio inicio minutos antes de las 14, en un desbordante salón de actos.
La ceremonia, que fue creada con el objetivo principal de estrechar lazos culturales con el vecino país, tuvo su inicio con el ingreso de tres banderas de ceremonia. Tanto la argentina, como la boliviana y la villanovense ingresaron al resinto portadas por sus respectivos abanderados y escoltas de sexto grado de dicha entidad educativa.
A continuación, y previo a ser entonadas las estrofas del Himno Nacional argentino que estuvo a cargo del coro del centro educativo (dirigido por la docente Miriam Perren), se produjo el ingreso de la promoción 2012 y de los integrantes de la comunidad boliviana. La canción patria del hermano país también fue cantada con euforia por los nativos de Bolivia y por la gran mayoría de los allí presentes.
Seguidamente, el ingeniero Rubén Lobatón brindó palabras alusivas a la fecha, dejando frases interesantes tales como “ningún boliviano puede no emocionarse al hablar de Bolivia en otro lugar del mundo” o “donde se ve a un boliviano se observa a una persona trabajadora”.
Después de él, fue el turno de la joven Emma Choque quien recitó un poema alusivo a su país, denominado “Viva mi patria Bolivia”.
Los integrantes de la comunidad boliviana volvieron a ser el centro de la escena al entregarle a la directora de la escuela de Nivel Primario, Estela Faró, un estandarte realizado por ellos para que sea utilizado por el establecimiento educativo. Allí Gabriel Choque González hizo la formal entrega en manos de la docente y a su turno deslizó: “Tenemos que sentirnos orgullosos por esta escuela”.
Faró también dejó su mensaje dirigido hacia los hermanos bolivianos y muy convencida, entre otras cosas, aseguró: “Me emociona escuchar a mis niños de Bolivia cómo hablan de su país”.
Luego se dio lugar al cura párroco Gustavo Gatto para bendecir una nueva Bandera argentina, el estandarte anteriormente mencionado de la República de Bolivia y tres trajes típicos portados por los integrantes de dicha comunidad.
Promediando el acto se prosiguió con el ritual de baja de la antigua Bandera y alta de la nueva. Este proceso tiene varias etapas, dando comienzo con el corte en tres franjas por un lado (dos celestes y una blanca) y del sol por otra parte. Dichos recortes fueron trasladados hacia el patio para luego ser depositados en la cama de laureles donde se procedió al incinerado que fue iniciado, antorcha en mano, por el secretario de Gobierno Natalio Graglia. Las cenizas fueron esparcidas por los difrentes pasillos del edificio.
Posteriormente, se procedió a izar el flamante símbolo patrio argentino, mientras de fondo nuevamente el coro de la escuela entonaba una canción, esta vez alusiva a la Bandera, y los testigos firmaban el Acta pertinente del remplazo.
Previo a dar por terminada la velada, un grupo de integrantes de la comunidad boliviana realizó un show de danzas y música típicas del vecino país que el público presente acompañó con entusiasmo hasta su culminación.