Ayer por la mañana, el secretario de Gobierno municipal Javier Suppo, fue abordado por los medios locales para indagar sobre las acciones que realizará el Ejecutivo, tras la reciente sanción de la nueva ordenanza que regula el ingreso de menores de edad y el consumo de alcohol en los espacios de diversión y espectáculos públicos.
En principio se manifestó “muy contento y muy conforme” por haberse aprobado la normativa “por unanimidad y consensuada con todos los sectores”. “Ahora será tarea del Ejecutivo Municipal de llevar adelante lo estipulado, después que sea publicada y promulgada. Vamos a seguir implementando los controles, sobre todo de alcoholemia e ingreso de los boliches”.
Consultado sobre el posible requerimiento de mayor número de agentes involucrados, señaló: “Tenemos equipos preparados de la ese área para capacitar a más personas si es necesario”.
Del mismo modo, destacó la exigencia -a partir de la nueva ordenanza- de detector de metales “en cada uno de los boliches para mejorar la seguridad”, al igual que el “cuentapersonas”, que determinará el límite establecido para la capacidad máxima de los salones habilitados. No obstante, añadió: “Toda normativa es perfectible, por lo cual iremos viendo cómo funciona en la práctica y corregiremos lo que haga falta”.
Por último, precisó que “se trabajará, como siempre, coordinadamente con la Policía”, instó a la escuela y a los padres a comprometerse en el cumplimiento de lo solicitado y pidió al municipio y al Concejo Deliberante villanovense que “traten y aprueben una ordenanza de similares características para que no tengamos un mayor control en una ciudad y menos en la otra”.