El embarazo es una etapa hermosa en la vida de cualquier mujer. Sentir al bebé moverse dentro del útero y tener la posibilidad de generar vida es una dicha que sin duda se vive como un milagro.
Estar embarazada es lo más lindo que te puede pasar, pero cuando el calor comienza a hacerse presente muchas mamás sólo quieren recostarse en un lugar fresco y esperar en ese lugar a que nazca el bebé.
Resulta casi una misión imposible, hacer que la mujer embarazada sienta placer en acudir al curso de gimnasia preparto con 35 grados de sensación térmica. Esto no es bueno para tu embarazo, la retención de líquido, el cansancio, el aumento de peso, la baja de la autoestima, los dolores lumbares, la debilidad de los músculos y las molestias asociadas a la gestación se incrementarán.
Aunque muchas personas te tiren abajo con comentarios que tienen que ver con la incompatibilidad entre color y embarazo debo contarte que de los grupos que me han tocado acompañar durante la gestación, los del verano fueron los más unidos, alegres y ágiles de todos. Obvio, ¡trabajando en la pileta!
La tarea en el agua y al aire libre hace que las mamás se sientan felices de estar en movimiento, disfrutan mucho de la liviandad que les ofrece el hecho de estar sumergidas. Como consecuencia, desaparecen o se minimizan las molestias en la zona lumbar y se disfrutan las charlas en un contexto más relajado y ameno.
Hacer gimnasia para embarazadas en el agua durante el verano es la mejor elección.
Si estás embarazada y estás transcurriendo la última etapa (tercer trimestre) te recomiendo que busques un grupo de embarazadas que trabaje en el agua y te unas a ellas. No te quedes sin entrenar. Tu cuerpo necesita de la gimnasia y te llenará de beneficios que serán útiles durante el parto y una vez nacido el bebé.

Ejercicios para hacer en el agua
durante el embarazo

Si estás embarazada y tienes la posibilidad de asistir a una pileta o tienes la pileta en tu casa te voy a describir algunos ejercicios.
Recomendaciones generales:
- No olvides que para realizarlos debes tener el consentimiento de tu obstetra y la profundidad del agua debe ser la adecuada (el agua debe llegarte hasta la mitad de la panza).
- El agua no debe provocarte calor ni frío.
- El agua debe estar a una temperatura agradable.
- No está recomendado que nades haciendo la patada de mariposa, por eso si eliges la natación debes buscar los estilos que no involucren este tipo de movimientos.
- Si sientes fatiga, calambres o cualquier incomodidad debes dejar de realizar la actividad.

Beneficios de la gimnasia en el agua

- Mejora la postura.
- Mejora la capacidad respiratoria.
- Beneficia a la circulación.
- Permite realizar diferentes movimientos sin sentir el peso de la panza.
- Evita los riesgos de caerse,
entre otros.
Si elegís entrenar en el agua no te vas a arrepentir y lo más importante “te vas a reír de los que te dicen que embarazo y verano no son compatibles”.

Viviana de los Ríos
Preparadora de Partos
Taller Gestación