|
|
|
|
|
|
|
La tarea durará un buen tiempo y es delicada |
|
|
|
|
|
En dos semanas comenzará la digitalización de parte del valioso fondo documental del Archivo Histórico de Córdoba, entre el que se cuentan actas del período colonial y censos poblacionales de los siglos XVIII al XX.
Al español Blas de Rosales la muerte lo sorprendió sin conocer del todo los alcances de las acciones que había compartido con un puñado de compatriotas, entre los que se destacaba Jerónimo Luis de Cabrera.
De Rosales cayó en un enfrentamiento con los pobladores originarios de estas tierras, apenas un año después de la fundación de la Córdoba de la Nueva Andalucía. El español murió en 1574, meses después de la ceremonia fundacional concretada a orillas del río que hoy se conoce como Suquía.
El acta de defunción del español ocupa 60 folios, rico en testimonios históricos de los primeros años de la Córdoba colonial. El documento está dentro del valioso acervo del Archivo Histórico de Córdoba, que en dos semanas comenzará a ser digitalizado por la organización civil Family Search, especializada en microfilmación y fotografía de archivos históricos. Para esto, el titular de la Agencia Córdoba Cultura Pablo Canedo firmó un acuerdo con representantes de esa entidad.
Entre los archivos que pasarán al soporte digital figuran los censos provinciales registrados entre 1770 y 1920. Se trata de un material muy significativo en términos históricos porque, entre otros aspectos, “ayuda a comprender cuáles eran los criterios de organización social de las sociedades del pasado”, señaló Gabriela Parra Garzón, directora del Archivo Histórico de Córdoba.
El censo de población de principios del Siglo XIX, por dar un ejemplo, incluye varios datos de interés: nombres y apellidos, profesiones (información muy apreciada por los historiadores para reconstruir la estructura socio-económica), la “condición” que especificaba si el poblador era “esclavo” o “libre” y la “clase social”, que distinguía “españoles”, “negros” e “indios”, una expresión palpable de las jerarquías del orden colonial.
También serán llevados al soporte digital los libros de las primeras causas judiciales y protocolos notariales -escrituras y testamentos- del Siglo XVI, y el fondo documental del antiguo Hospital San Roque, que reúne material desde el Siglo XVII hasta principios del Siglo XX. Estos últimos son uno de los más consultados por investigadores e historiadores.
“La digitalización -continúa Parra Garzón- permite dos cosas muy importantes: preservar los documentos y ampliar las posibilidades de acceso. Recibimos constantemente la visita de usuarios interesados que vienen de otras provincias y del exterior. Nuestro archivo tiene un acervo documental que es muy apreciado, porque prácticamente nos permite reconstruir nuestra historia desde la fundación de la ciudad. Hay muchos investigadores de otras provincias que se trasladan hasta Córdoba para consultar los fondos documentales que aquí tenemos”.
El Archivo Histórico de Córdoba atesora en su sede un acervo de 1.600 metros lineales de documentos, esto lo convierte en el segundo en importancia de la Argentina. Desde hace unos meses se está trabajando en la preparación de todo el fondo documental para su traslado al nuevo edificio que se construye en avenida Poeta Lugones de la capital provincial, tarea que lleva varios meses de preparación para que el material no sufra daños.
Además de los manuscritos y demás documentos, el archivo provincial cuenta con una colección de fotografías del Siglo XIX y principios del Siglo XX, que reúne registros de actividades públicas y escenas de la vida privada. Unas 2.000 fotografías de esta colección están siendo digitalizadas en Rosario y estarán disponibles en los próximos meses.
El acondicionamiento del material para la digitalización es una tarea que exige mucha paciencia, tiempo y cuidado. A tal punto que es un paso que los especialistas consideran muy importante. “La documentación histórica requiere de un tratamiento mínimo, porque ha sufrido el paso del tiempo. A veces el material está afectado por organismos o agentes biológicos”, ilustró Parra Garzón.
Pequeñas alteraciones provocadas por la humedad o la temperatura requieren una intervención sobre el papel. Dobleces o arrugas también exigen una minuciosa tarea. Y cuando se constatan desgarros o desprendimientos hay que esforzarse para que el documento recupere su fisonomía.
Se trata de una tarea que viene insumiendo varias semanas de trabajo en el Archivo Histórico y según calculan continuará durante un buen tiempo. “A veces se tiene la idea de que digitalizar es muy fácil y rápido, y no es así”, remarcó la directora.
El proceso de digitalización se hará en la misma sede del archivo, mediante el registro fotográfico del material histórico con cámaras de alta resolución (de 16 a 50 megapíxeles en formato TIFF).
La tarea estará a cargo de la Family Search Argentina, importante organización civil dedicada a realizar estudios de genealogía, con vasta trayectoria en microfilmación y digitalización de documentación.
Días pasados el presidente de la Agencia Córdoba Cultura, Pablo Canedo, y Gustavo Mernies, por parte de Family Search, firmaron el acuerdo para la concreción del trabajo.
Otras notas de la seccion Locales
Olaviaga y Bedano en el racimo de opciones
Los comicios marcados por la presencia de Zannini y Cavagnero en las boletas
"Ya no es factible sostener la imagen de familia dominante"
Entusiasmo y aprendizaje: lo que dejó la Feria de Ciencias
"Cada vez más niños se involucran en la ciencia"
|