Escribe: Federico Gazzoli
Lo de Unión Central ya dejó de ser sorpresa y se convirtió en una realidad que lo posiciona como el mejor equipo de la Zona “B”. Sin un juego brillante, pero sí con mucho orden y sacrificio por parte de sus protagonistas, el equipo dirigido por Néstor Vicario superó ayer por la tarde otro duro escollo.
En una cancha en la que a muchos equipos les cuesta salir victoriosos - y de hecho cerca del final pudo haber perdido- el “Aurinegro” golpeó en los momentos justos y se alzó con un triunfo importante.
El inicio del encuentro, al igual que toda la etapa inicial, fue una continuidad de errores e imprecisiones que hicieron que la mayor parte del tiempo la pelota ruede por la mitad de cancha sin un claro dominador. O que el esférico viajará mucho por el aire, producto de el fuerte viento y las falencias para administrar de sendos elencos.
En dicha etapa el dueño de casa nunca pudo llegar a comprometer a Sami Suárez, salvo con balones llovidos que el uno controló sin complicaciones. La visita apostó a lastimar con la buena pegada de Leonel Strumia. Justamente el propio mediocampista, cuando se cumplió el primer cuarto de hora, ejecutó un tiro libre que exigió en demasía a Néstor Barbero.
Cuando todo hacía presumir que los primeros 45’ iban a morir sin modificaciones en el tanteador, a 10’ del final llegó la primera emoción de la tarde. Juan Zabala se llevó puesto a Kevin Machado dentro del área y el árbitro Martín Sandobal no dudó en decretar penal para Unión Central. El encargado de ejecutarlo fue Strumia quien aseguró la pena máxima definiendo al medio (Barbero se jugó hacia su derecha) para darle a los suyos una ventaja que no se modificó llegado el entretiempo.
La etapa complementaria resultó una realidad totalmente diferente con respecto a lo que pudo observarse en el período inicial. El dueño de casa, con la obligación de revertir la pálida imagen salió en busca del empate frente a un rival que apostó a sacar beneficios de los espacios que iba a dejar el local.
Fue así que el trámite cambió considerablemente y las mejores jugadas del duelo se produjeron en ese lapso. De arranque nomás José Estévez intentó sorprender con un derechazo violento que salió por muy poco sobre el travesaño.
El elenco de calle Rucci respondió a los 5’ cuando Ruiz Moyano quedó mano a mano con Barbero y definió de derecha pero el uno tapó con los pies.
Lo mejor de los dirigidos por Carlos Zabala se vio a partir de los 10’ cuando logró comenzar a generar algunas maniobras de riesgo en ofensiva. La primera llegó cuando Sami Suárez tuvo que volar hacia su palo derecho para despejar un tiro libre de Estévez.
A pesar de la expulsión de Esteban Contreras (codazo sobre Oscar Pérez) a los 12’, los de Ausonia siguieron presionando hasta que a 10´ del final encontró la igualdad. Gabriel Márquez ingresó al área por la izquierda y remató de derecha, Pablo Núñez despejó con su cabeza sobre la línea, aunque por el segundo palo apareció Sergio Theiler para definir de zurda y estampó el 1 a 1.
No conforme con esto, Juventud siguió intentando y tres minutos más tarde tuvo la oportunidad de pasar de vencido a vencedor. Jorge Rodríguez derribó a Estévez dentro del área y el referí pitó penal pero Márquez, intentando asegurar su ejecución, remató fuerte al medio aunque muy elevado y la pelota se fue por encima del travesaño.
Unión Central, mientras tanto, tenía guardado el as bajo la manga y lo jugó a dos minutos del final cuando el ingresado Federico Sánchez, vía contragolpe, ingresó al área solo por la derecha y se enfrentó con el arquero rival para definir rasante y señaló el 2 a 1 que le sirvió a los de Vicario para consolidarse en la punta.
La figura
Leonel Strumia. En un partido con mucha pierna fuerte y pelotazo, el volante central siempre intentó aplicarle claridad al juego, poniendo la pelota pegada al piso y tratando de pasarla hacia el compañero mejor ubicado. Además, abrió el marcador.
El árbitro
Regular arbitraje de Martín Sandobal quien desde el principio intentó evitar el juego brusco pero con esa premisa se apuró en sacar algunas amarillas en los primeros minutos. En el segundo tiempo hizo lo contrario, cuando obvió de mostrar alguna cartulina del mismo color. Bien en las expulsiones.