Maximiliano Francisco Eve (35), sindicado como uno de los autores materiales del atentado perpetrado contra el dirigente Alejandro “Caño” Roganti en abril de 2008, quedó ayer alojado en una celda del Establecimiento Penitenciario Número 5, ubicado en barrio Belgrano de esta ciudad, tras haber sido extraditado desde España, donde permanecía detenido desde junio de aquel mismo año.
Eve llegó escoltado por la Interpol al aeropuerto Córdoba, procedente de la península ibérica, en un vuelo que arribó a las 15.55.
Desde ese momento, el presunto agresor fue entregado al Grupo de Operaciones Tácticas (GOT) de la Policía provincial, que lo escoltó hasta la cárcel local, donde ingresó en medio de un fuerte operativo de seguridad.
Tras una larga y compleja tramitación, en la que tomaron parte el Estado español, la Cancillería argentina, el Tribunal Superior de Justicia, el Juzgado de Control y la Fiscalía de Instrucción del Tercer Turno de los Tribunales villamarienses, a cargo de Daniel Del Vö, Secretaría de Juan José Aguilar, finalmente el sospechoso podrá ser indagado por el funcionario judicial que entiende en la causa.
Cabe consignar que Maximiliano Eve fue detenido en la localidad catalana de Sabadell, distante unos 20 kilómetros de Barcelona, el 23 de junio de 2008, en circunstancias en que se hallaba en un bar, mirando un partido de la selección argentina de fútbol.
En aquella oportunidad se lo acusaba de integrar una agrupación delictiva conocida como “la banda de los cordobeses”, que había perpetrado varios asaltos a joyerías en España.
Maximiliano Eve se había fugado hacia el Viejo Continente el 17 de abril de aquel año, tres días después de que Roganti fuera baleado en la puerta de su casa.
Curiosidades del destino, el presunto agresor vino a ocupar una celda de la cárcel de barrio Belgrano también un día en que el combinado Albiceleste de fútbol disputó un encuentro contra su par paraguayo.
Aunque no está confirmado, Eve sería indagado por Del Vö los primeros días de la semana que viene (lunes o martes) y luego, aparentemente, trasladado al penal de Bouwer, en la capital provincial.
Cabe recordar que por el mismo atentado ya fue condenado el hermano mayor de Maximiliano, Sebastián Baltazar Eve (39), a quien le fue impuesta la pena de 18 años de prisión, ya que se probó que fue quien efectuó los disparos contra el dirigente de Luz y Fuerza.
La Justicia espera que Maximiliano Eve aporte datos nuevos que permitan dar con los autores intelectuales del atentado, entre los que se sospecha que habría dirigentes de la misma agrupación sindical.