Los humanos conocemos demasiado bien, lamentablemente, las consecuencias de los caminos del odio.
Conocemos demasiado bien esas rutas de enfrentamientos, entre iguales o desiguales, que dejan heridas difíciles de curar y una serie de cicatrices en los corazones de los pueblos.
“Si yo tuviera un corazón, escribiría mi odio sobre el hielo y esperaría que saliera el sol”, escribió Gabriel García Márquez.
La frase parece oportuna en un momento en que los coletazos del odio se filtran en las calles.
Tal vez, ante la evidente tensión social que transita entre cacerolas y cruce de agravios entre unos y otros, sería oportuno escribir el odio sobre el hielo.
Por unos instantes, apenas, sabiendo que el sol primaveral asoma a la vuelta de la esquina.
No podemos darnos el lujo de retroceder en la rueda de la historia a tiempos, no tan lejanos, teñidos del color de la sangre.
No podemos ni debemos.
Siempre es buen momento para la reflexión. Pensar en el prójimo, escuchar, respetar su pensamiento no significa resignar ni los derechos ni las convicciones individuales o colectivas.
El país necesita de nuestra madurez como ciudadanos para que esta democracia que tanto nos costó conseguir sea eterna como los laureles de nuestro Himno.
Precisa de la madurez de la dirigencia para que podamos, en conjunto, no sólo morir con gloria, sino vivir con gloria.
Para que el ruido de rotas cadenas siga escuchándose en cada rincón de nuestra Patria.
Para que podamos ver, con nitidez, el trono de la noble igualdad.
Todos, desde nuestros lugares, debemos contribuir para que los destinos del país no se estrellen contra
las murallas de poderosos intereses alejados de la sociedad en su conjunto.
Tenemos la obligación moral de analizar nuestros dichos y conductas antes de caer en confrontaciones que puedan poner en riesgo los logros (con virtudes y defectos) obtenidos desde la recuperación de la democracia.
“La oscuridad no puede deshacer la oscuridad, únicamente la luz puede hacerlo. El odio nunca puede terminar el odio, únicamente el amor puede hacerlo”.
Lo dijo Martin Luther King, un hombre que supo de luchas y de discriminación, pero nunca abandonó la resistencia en paz y con amor. La única manera de vencer los desbordes del odio.
Los principales dirigentes del partido PAIS, entre ellos Enrique Sella y Alicia Menta, cuestionaron las declaraciones de funcionarios nacionales, tras el fracaso de la audiencia de conciliación en el marco del conflicto entre la provincia y la Nación.
Después de una reunión realizada en Córdoba, la agrupación manifestó su apoyo al Gobierno de José Manuel de la Sota y volvió a insistir con la necesidad de diálogo entre las partes en conflicto.
“Como parte integrante del Movimiento Nacional Justicialista y fiel al pensamiento del General Juan Domingo Perón de que ‘no se puede estar en dos lugares al mismo tiempo’, el partido PAIS se define y brinda todo su apoyo al Gobierno provincial, a los intereses económicos de todos los cordobeses por la vigencia plena de un estado auténticamente federal y democrático”, señaló un documento enviado ayer a nuestra Redacción.
Los ex legisladores provinciales se refirieron, en otro de los puntos, a la movilización de ciudadanos del pasado 13 de setiembre.
“Con relación a las manifestaciones de descontento realizadas por los ciudadanos en todo el país el día jueves 13 del corriente y que ha significado un serio llamado de atención, los dirigentes del partido PAIS llegaron a la conclusión de que es indispensable y urgente encontrar caminos de entendimientos y diálogos entre todos los sectores de la vida nacional”.
Finalmente, remarcaron: “Pensamos también que nuestro país ha perdido demasiadas oportunidades de potenciar su desarrollo integral, para asumirnos nuevamente en enfrentamientos estériles que no conducen a nada al conjunto de la sociedad”. Del encuentro, desarrollado en la sede de PAIS de Córdoba capital, participaron también los referentes José Domínguez, Hugo Montes, Ernesto Chavero, Jorge Romero y Graciela Vergara.
Clasificados
El legislador nacional Jorge Valinotto fue entrevistado en el programa “Las voces de todos” que emite América 24. El diputado villamariense se refirió a la situación de la provincia y el conflicto con la Nación y también al proyecto que impulsa el derecho a votar para los jóvenes de 16 y 17 años.
En este último punto, se refirió a la encuesta realizada entre los estudiantes locales (publicada días atrás por EL DIARIO) y dejó claro que su postura sobre el tema “era personal”, ya que en el bloque del FAP había diversas posiciones sobre el particular.
Cabe destacar que el diputado apunta a que la propuesta del Gobierno tiene una finalidad electoral y rescata que la mayoría de los adolescentes no demuestra interés en concurrir a las urnas.