La canción tradicional fue dejando paso, en los años 70, a una temática de autor que poco a poco se hizo más intimista, motivo por el cual perdió una gran parte de su carga política.
El corte no se produjo de una manera brusca. Recién estrenada la nueva década, la confluencia de dos estrellas causa un torrente de luz y color. Aparecen en escena con un toque majestuoso las canciones de Carole King y James Taylor. Durante el comienzo de los “años dorados”, estos compositores salen a la luz a interpretar sus propias obras para mostrarse en vivo ante el público que disfrutaba con sus presentaciones esporádicas.
De este molde, nace una canción difundida a través del mundo con una clara esencia amistosa creada por Taylor para la reina del piano, Carole King. El tema en cuestión se tituló "You' ve got a friend" (en nuestro país "Tu amigo fiel"), con una consigna que fue dominante por aquellos tiempos agitados, cargados de protesta y atiborrados de indumentarias multicolores y festivales al aire libre como el de Woodstock o el de la isla de Wright. Por aquellos años, todo se solucionaba de un modo civilizado con una sonrisa en la boca y una flor en el cabello. El éxito masivo del dúo conformado por King-Taylor proyecta la figura del cantante que interpreta sus propias canciones, adquiriendo este modelo una creciente relevancia.
A partir de ese momento, las obras musicales de las figuras estelares del pop comienzan a reflejar el clima espiritual de su generación en términos humanistas, se retorna al campo y a los nuevos modelos de convivencia.
Paralelamente a estos hechos, el matrimonio Carly Simon-James Taylor empieza a ser enormemente popular en los Estados Unidos, tanto por su estilo musical como por la aureola de superviviente que rodeaba al cantautor, como también por la imagen vitalista que resultaba de su esposa. Estos músicos, en líneas generales, solían ser autodidactas, de formación universitaria, que le otorgaban una gran importancia al contenido literario de sus creaciones, sin renunciar por ello a los instrumentos eléctricos.
Censura a la minifalda
Durante 1962, Mary Quant diseñó una prenda que originó polémica: la minifalda. Hoy, a medio siglo de su lanzamiento al mercado mundial, esta creación sigue ocupando un lugar importante en el vestuario de la mujer.
Durante los primeros años se convirtió en una verdadera moda revolucionaria y comenzó a utilizarse con botas altas que llegaban a las rodillas. Poco a poco, la mujer se atrevió a incorporarla mostrando sus piernas, convirtiéndose en un gran desafío para la época. Fue prohibida, criticada y se la defenestró como una prenda indecente, pero finalmente sobrevivió y ha cumplido 50 años desde su creación.
Atilio Ghezzi
Especial para EL DIARIO