Un niño de 9 años perdió la vida en la madrugada de ayer durante un incendio registrado en una vivienda de la vecina Tío Pujio, localidad que se vio conmocionada por el hecho.
Se trata de Maicol Nicolás Herrera, informaron fuentes de la Policía.
Todo comenzó poco antes de las 2, cuando la pequeña víctima fatal y su hermano, de 10 años, dormían solos dentro de la casa ubicada en calle José Luis López Fiusa 362 de Tío Pujio. Aparentemente, una vela que había quedado encendida fue la que causó el siniestro.
Si bien Maicol fue asistido por los Bomberos Voluntarios una vez que pudo ser rescatado, posteriormente fue trasladado al Hospital Regional Pasteur, donde poco después falleció como consecuencia de las lesiones sufridas.
Encerrados
Según comentaron los vecinos del sector, Maicol vivía en la casa junto con su madre, tres hermanos y dos hermanas, éstas un poco mayores, de 12 y 13 años, respectivamente.
Dos de los hermanos habían sido retirados de la morada por su padre.
En tanto la mujer y las dos chicas habían salido el viernes por la noche y habían dejado a los dos niños encerrados con llave dentro de la casa y con una vela encendida, ya que la vivienda no contaba con el servicio de energía eléctrica.
Por algún motivo, que se tratará de esclarecer mediante una investigación, la llama de la vela tomó contacto con algún material inflamable y esto desató el incendio.
De acuerdo con el relato de algunos vecinos, el mayor de los chicos, sofocado por el humo, se levantó a tomar agua y al verse rodeado por las llamas y el humo comenzó a pedir auxilio a los gritos.
También dijeron los habitantes del sector que era habitual que la madre y las hermanas salieran y dejaran a los pequeños encerrados con llave dentro de la casa.
Un vecino
Un vecino del sector despertó en medio de la noche porque pudo oler el humo. Al salir afuera comprobó que la casa estaba en llamas y rompió una ventana, intentado dar una mano.
Aparentemente, por esa abertura pudo salir el mayor de los hermanos. Pero Maicol, desvanecido por el humo y al borde de la asfixia, no pudo zafar y fue presa de las llamas que, según versiones, encendieron las sábanas con las que se cubría y dañaron gran parte de su cuerpo.
Los Bomberos Voluntarios, que también fueron requeridos por los vecinos, no tardaron en acudir. Pero ya era tarde para el pequeño Maicol.
El baby, de duelo
A Maicol Herrera le gustaba jugar a la pelota. Integraba el equipo de baby fútbol de la Clase 2003 del Deportivo Municipal de Tío Pujio, que debía disputar en condición de local un partido mañana domingo contra su par de All Boys. El cotejo fue suspendido, pues se realizará una jornada de duelo.