El grave hecho que sucedió el último sábado en Ticino en la primera final de quinta división provocó una firme decisión de la Liga Villamariense de detener el comienzo del Torneo Clausura de divisiones inferiores y que dicha jornada se utilice como “concientización y reflexión”, además de poner en marcha otras acciones en pos de erradicar la violencia en el fútbol juvenil.
Dicha resolución se informó anoche desde el seno de la Liga y la cual fue ampliamente analizada por la Mesa Directiva en la reunión del último martes por el cuerpo de delegados, donde quedó la preocupación por lo sucedido y manifestaron la necesidad de reflexionar y ampliar el debate para todos los protagonistas para captar ideas, encontrar herramientas y, principalmente, trabajar y realizar acciones para un mejor desarrollo del fútbol juvenil.
Ello, justamente, fue explicado anoche por el presidente de la Liga, Carlos Airaldi, quien expresó que dicha decisión se tomó tras “un debate donde cada uno de los delegados expuso su opinión al pedido que hizo el delegado de Asociación Española (Juan Pablo Torres), creyendo que debiera servir esto para reflexionar, pensar, buscar y generar cuestiones que nos cambien la forma en que se llegó a esta situación, más allá que no es un suceso habitual y que no hubo manera que esto se pudiera evitar porque fue todo muy rápido”.
Por lo tanto, la resolución fue que “los clubes aceptaron parar a pesar de lo acotado del calendario y se comprometieron entre sí en realizar una jornada de reflexión con sus cuerpos técnicos, jugadores, padres y con todos los que están cerca, ayuden y colaboren en cada una de las instituciones para hacer posible la actividad”.
A continuación, expresó que “también realizaremos un encuentro el día miércoles donde vamos a estar todos los actores y aportarle a ello profesionales que tengan que ver con el manejo del ser humano, sus reacciones y demás, para que nos puedan ayudar y colaborar a sacar conclusiones que de ahora en más sirvan para estar mejor”.
El máximo directivo del fútbol local, además, manifestó otras acciones que se tomaron y, en ese sentido, comunicó que “desde la próxima semana en cada inicio de partido de todas las divisiones los equipos irán acompañados con banderas que llevarán mensajes en contra de la violencia y también realizaremos boletines con reflexiones que tengan que ver con esto y que serán distribuidas en todas las canchas por un tiempo hasta tanto logremos una medida que nos satisfaga o creamos que hemos hecho lo suficiente, aunque nunca se termina de hacer”.
Y, en otro punto de la charla, recalcó que “no reaccionar ante un hecho de esta magnitud es como taparlo debajo de la alfombra y dejarlo pasar como un hecho más; dijimos que no y queremos hacer partícipes a toda la sociedad que desde la Liga vamos a generar acciones por la cual pedimos la colaboración de todos”.
“Este es el accionar de ahora en más en pos de una parada de actividad que no tiene que ver con parar por hacerlo nada más, sino buscando todas las formas para cambiar porque esto es un juego y debemos bregar para que se mantenga ese espíritu”, concluyó.
De esta manera, la dramática situación vivida el último fin de semana fue un punto de inflexión para aunar esfuerzos por parte de todos los clubes en función de actuar y aportar a la formación de los jóvenes a través del rol social que cumplen los clubes mediante su contención.
Y no sólo la cuestión debe centrarse en los protagonistas nombrados (jugadores, técnicos, padres y directivos), sino también en todos los actores preponderantes que rodean este deporte (árbitros, medios de comunicación y demás) porque desde todos los ámbitos que abarca el fútbol corresponde ayudar y colaborar para unas inferiores sin violencia y que ésta sea un ámbito de formación y educación, más allá de los logros deportivos.
“Mucha impotencia”
“Lo que sucedió el sábado nos generó mucha impotencia en el sentido de no poder dar ningún tipo de explicación, porque fue todo muy de repente y los que estábamos en la cancha realmente no entendimos nada. Nos dejó perplejos”, explicó en la reunión del martes por la noche el delegado de Atlético Ticino, Marcelo Bechero.
El mismo además manifestó que “es un momento muy duro, tanto los directivos como los padres no sabemos cómo seguir adelante porque, sinceramente, no conocemos que se hace en una situación de estas características”.
Igualmente, en ese sentido, reconoció que realizarán “una reunión con una especialista para instruirnos en cómo actuar porque no se trata de aislar o condenar al chico, sino saber cómo acompañarlo en una situación así”.