El viernes por la noche se desarrolló la ceremonia de festejos por los 46 años de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE), en el hall de la Medioteca Municipal Mariano Moreno.
Bajo la conducción de Puqui Charras y ante una considerable concurrencia que se dispuso en las mesas ubicadas a modo de café concert, la velada contó con la actuación de diversos artistas invitados.
Tras las palabras del titular de la entidad literaria, Eduardo Belloccio, se montó una puesta en el formato de teatro leído. La comedia del autor cordobés "Las hijas de Roberto Arlt" fue representada por ocho socios de la SADE: Mary Amaya, Trini Galera, Cristina Pablos, Francisca Córdoba, Olga Bruera, Mónica Fornero, Juan Alberto Díaz y Alberto Dalmaso (en voz en off).
De esta manera, la institución rescató una de las modalidades en desuso de nuestra escena cultural que tuviera su pico de esplendor en la época dorada de los radioteatros. Acto seguido, subió a escena la pequeña (sólo de edad) Melanie Sol Rocha, quien a pesar de sus envidiables 13 años logró cautivar a la audiencia con su interpretación de "No llores por mí Argentina", por la cual obtuvo un merecido bis.
Trascartón, Edgar Méndez ofreció un peculiar y delirante recitado munido de un nutrido lunfardo tanguero.
En el tramo final, la destacada actriz Silvana Fornero brindó su unipersonal "Sola, re sola, de soledad absoluta", una versión libre del clásico homérico del mito de Penélope y Ulises, inscripto en "La odisea". Con pasajes cómicos y dramáticos, la artista utilizó no sólo el escenario sino los pasillos ubicados entre el público para su performance. En plena puesta, la actriz mechó situaciones desopilantes como un "call center" del Olimpo o menciones a la coyuntura argentina como "los semidioses Yabrán y Néstor" o la cadena nacional de Zeus.
Por último, la cantante lírica Elizabeth Pereyra regaló interpretaciones de "El último café", "Summertime" y "Color esperanza".