La conmoción se apoderó del ánimo de las poco más de seis mil almas que habitan Pozo del Molle.
Es que la paz que habitualmente reina en esa localidad fue brutalmente violentada por el asesinato de la jubilada Catalina Bernardiz de Navarro, de 72 años, quien fue encontraba sin vida debajo de una cama de su casa, ubicada en la calle Tucumán, a la altura de 200, aproximadamente en mitad de la cuadra, en el barrio Jardín de Infantes.
El hallazgo se produjo alrededor de las 20 del lunes, poco después que unos vecinos dieran la alerta a la Policía, pues advirtieron que el perro de la víctima se encontraba afuera de la vivienda, lo que no era habitual y, además, la puerta de calle de la casa estaba abierta.
Un profundo corte en el cuello
Cuando la Policía llegó al lugar del hecho e ingresó a la morada, encontró a Bernardiz debajo de una cama de dos plazas.
La mujer tenía un fuerte golpe en la nuca y un profundo corte en el cuello. Su cabeza yacía en un charco de sangre, según pudo conocerse de manera extraoficial.
Cabe consignar que la cama debajo de la cual fue encontrada la víctima no era la suya sino que estaba ubicada en una habitación para huéspedes, que posee la vivienda.
Aparentemente, Bernardiz habría sido agredida en una primera instancia en la cocina y luego arrastrada hasta el lugar donde fue encontrada sin vida.
Al constatarse el deceso de la mujer, fueron convocados al lugar peritos policiales y funcionarios judiciales.
En este caso, la investigación de lo ocurrido recayó en la Fiscalía de Instrucción del Segundo Turno de los Tribunales de Villa María, a cargo de Gustavo Atienza, por intermedio de la Secretaría de Elba Oyola, quien dispuso como primera medida que se realizara una autopsia.
Por otra parte, los especialistas policiales trabajaron hasta bien entrada la madrugada de ayer recogiendo huellas y tomando fotografías de la escena del crimen con el propósito de recolectar elementos de prueba para la investigación.
Posibles móviles
El comisario mayor Carlos Bobadilla, jefe de la Departamental Río Segundo de Policía, manifestó a los medios que “no se descarta ninguna hipótesis en principio y los móviles podrían ser tanto el robo como cualquier otro, incluso el pasional”, señaló el funcionario policial, quien agregó, además, que al ingresar a la vivienda encontraron “todo ordenado y no se observaron signos de violencia”, dijo.
Pero todo, claro, está sujeto a la evaluación que hagan los expertos que investigarán el caso.
Por el momento, no hay detenidos ni se confirmó que se trabaje sobre pistas firmes.
Cabe consignar que un hijo de la víctima es policía retirado y que un nieto de Bernardiz es policía en ejercicio.
Foto 2: El comisario mayor Carlos Bobadilla, titular de la Departamental Río Segundo (gentileza Periódico Razones de Pozo del Molle)