A quien le quepa el sayo...

Señor director:
Quiero dirigirme a las autoridades correspondientes y responsables de nuestra seguridad, en primer lugar, y también del cementerio “La Piedad” de Villa María, para hacerles saber que el día domingo 23 de setiembre del corriente, a las 12.30, mi hijo fue con su abuela a visitar y llevar flores a la tumba de su abuelo, dejando el auto en el estacionamiento que es parte y de propiedad del cementerio, es decir, de la Municipalidad de Villa María.
Después de 20 minutos, cuando regresan encuentran el vidrio de la puerta del conductor roto y descubren que faltaba el celular.
Una señora que se encontraba en el lugar le manifiesta que un “pibe de gorra y con una bici playera” había sido quien realizó el robo.
Semejante daño material, y en especial emocional, por tan poca cosa; un celular, que no cuesta más de 150 pesos.
Sé que no es el primer caso ni será lamentablemente, por ahora, el último. Puedo enumerar los que yo conozco; el año pasado, en el mes de agosto, le pasó lo mismo a mi tío, en mayo de este año a una amiga de mi hija que vino de Buenos Aires a ver la tumba de su papá.
A mi tía, dentro del cementerio le robaron el monedero; mi esposo, 15 días antes que nos robaran a nosotros, llegando al cementerio, se encuentra con un Ford EcoSport y el patrullero de la Policía con la misma situación, rotura de vidrio para robar vaya a saber uno qué y así cientos de casos.
Ahora, yo me pregunto, si ya no podemos andar en las calles porque te manotean, te tironean para sacarte la cartera, corriendo además el riesgo de golpearte y lastimarte muy mal, los chicos no pueden andar por la calle tranquilos y menos en bicicleta porque los golpean para robarle zapatillas, celulares, plata o la misma bicicleta, amenazándolos con un sinfín de palabras y, en el peor de los casos, con algún otro elemento. Ni hablar de llegar o salir de tu casa, no te alcanzan los ojos, oídos y todos los sentidos que Dios generosamente nos regaló para cuidarte de que alguien esté por atacarte.
Pero no poder ir al cementerio con tu dolor personal… a llevar una flor y visitar por un momento a tus seres queridos que allí descansan en paz, ya no son sensaciones para la gente, son vivencias reales y muy desagradables.
Señor jefe de la Policía, ¿cuánto le puede demandar a esa honorable institución detener a estos, seguramente, menores de edad, que a diario delinquen en la playa de estacionamiento del Cementerio La Piedad?
Señor jefe del Cementerio la Piedad, usted es el responsable de lo que pasa en ese lugar, ¿o acaso yo no soy responsable si alguien se lastima o le sucede algo en mi casa, en mi negocio, etcétera?
Quiero pensar y sentir que puedo salir y entrar de mi casa para andar tranquila por mi ciudad a cualquier hora y lugar.
Quiero pensar y sentir que mis hijos pueden andar libremente.
Quiero pensar y sentir que puedo ir al cementerio a llevar una flor a mis seres queridos que ya no están.
Quiero no tener que agarrar fuerte la cartera y mirar para todos lados con miedo al arrebato.
Por favor, hagan algo por nuestros hijos, nuestros ancianos, que son los mas desprotegidos, hagan algo por todos los ciudadanos de buena voluntad, porque tenemos el derecho constitucional de vivir libres y con seguridad, porque para eso les damos nuestros votos y pagamos nuestros impuestos.

C. P. - DNI 17.555.120