Debido a problemas en la infraestructura edilicia de la oficina de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) delegación Villa María, no hubo ayer atención al público que pretendió hacer trámites o gestiones en la dependencia ubicada en la primera cuadra de la calle Mitre.

“El problema devino de una cuestión climatológica; tenemos agua por todos lados y una situación que ha superado lo que es nuestra estructura edilicia”, indicó el titular de la Unidad de Atención Integral (UDAI) local, Guillermo Rocha.

“El edificio tiene techo de zinc y ha llovido de manera inusual, existían algunas goteras, pero la intensidad de la precipitación provocó un colapso que determinó la adopción de la medida preventiva de no trabajar”, sostuvo Rocha en diálogo con EL DIARIO.

“Fue mi decisión que todos estos sectores no trabajaran. Existía riesgo por el agua que caía adentro de las oficinas y el sector de atención al público, a pesar de que la semana pasada llamamos a técnicos que repararon los lugares problemáticos”, subrayó el reporteado por este matutino.

“Esta vez ha sido mucho más grave el daño que ha hecho el agua”, remarcó.

“Otras veces hemos tenido filtraciones pero las hemos ido superando. Los trabajadores reaccionan muy bien, se quedan y colaboran para encontrar soluciones. Esta vez no pudimos superar el trance y tuvimos que suspender la atención al público”, manifestó el principal referente de la entidad previsional.

“Tenemos un edificio que alquilamos desde hace 34 años, con el desgaste propio de una construcción con esta antigüedad, sumado a que pasan por aquí 500 personas por día y trabajan más de 30 empleados”, señaló.

El funcionario resaltó además que el espacio donde funciona actualmente la repartición fue una casa y, “por más que se quieran hacer las reparaciones, en realidad habría que readaptarlo al uso que le damos”.

Respecto al traspaso de la UDAI hacia un nuevo edificio en avenida Hipólito Yrigoyen, Rocha consideró que esto “ha sido un detonador para el reclamo del sector gremial y los trabajadores que piden el traslado hacia el edificio de enfrente”.

Al referirse sobre si la actividad en la repartición podría volver a la normalidad durante la jornada de hoy, Rocha fue cauto.

“Hemos elevado esta situación a los niveles que corresponden. Por su parte, los trabajadores se reunirán con sus representaciones y decidirán los pasos a seguir. Probablemente mañana podamos estar trabajando nuevamente”, advirtió.

“Cada uno debe cumplir su rol”, concluyó.