La camarista Silvia Saslavsky de Camandone le impuso ayer una pena de tres años de prisión efectiva a un personal trainer domiciliado en Villa María que confesó ser el propietario de dos armas de fuego ilegales secuestradas por la Policía durante un procedimiento en el que también fueron detenidos otros tres individuos, dos de ellos radicados en la Capital Federal.

Se trata de Gustavo Raúl Demarchi (42), quien fue juzgado junto a los coimputados Jesús Josué Rodríguez Lalus (34) y Leonardo César Castelli (30), en el marco de una causa que también tuvo como implicado al villamariense Claudio Antonio Sánchez (33), a quien le concedieron el beneficio de la “probation”, o suspensión del juicio a prueba, y evitó sentarse en el banquillo de los acusados.

A poco de iniciada la audiencia de debate, Demarchi desligó a sus amigos del hecho que se les atribuía y se hizo cargo en solitario de la acusación, asegurando que las armas incautadas en el baúl del vehículo en el que se desplazaban los cuatro sospechosos eran de él.

En aquel operativo, realizado el 14 de setiembre del año pasado, los efectivos policiales intervinientes secuestraron un revólver calibre 38 corto, tipo lechucero, cromado, y una pistola calibre 22 largo, con empavonado color negro, marca Gunther 66, ambos con su número de identificación suprimido.

Las armas estaban en el baúl de un automóvil Renault Sandero, patente JCV 352, conducido por Sánchez, que fue interceptado en la esquina de San Luis y Antonio Sobral, alrededor de las 21.

Demarchi, nacido en Alto Alegre el 20 de febrero de 1970, pero radicado en Salta 1261 de esta ciudad, fue declarado autor responsable de los delitos de “tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal”, “tenencia ilegal de arma de guerra sin la debida autorización legal” y “encubrimiento reiterado” (dos hechos).

Castelli, alias “Maximiliano Nazar Peirano” o “Bruno Daniel Castelli”, nació y vive en la Capital Federal, mientras que Rodríguez Lalus es de nacionalidad uruguaya, pero está domiciliado en Dock Sud, también en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En tanto, el villamariense Sánchez es vendedor de autos y está afincado en Carlos Pellegrini 927, en barrio Rivadavia.

De acuerdo con la investigación judicial, la Policía contaba con información de que cuatro sujetos cometerían un asalto a mano armada, por lo que realizaron un control vehicular que derivó en la detención de los cuatro sospechosos y el secuestro de las armas.

Cabe señalar que Demarchi tiene una causa recientemente iniciada en el Juzgado Federal de Villa María por “tenencia de estupefacientes”, ya que fue detenido el pasado 9 de octubre en la ruta pesada y se le secuestró medio kilo de cocaína.

Como se trata de un reincidente, deberá purgar casi la totalidad de la pena impuesta en la víspera (sólo podrá solicitar la “libertad asistida” seis meses antes del cumplimiento total de la sentencia), al margen de lo que pueda resolver la Justicia Federal.

En tanto, y pese a ser absuelto, Castelli no pudo recuperar la libertad porque tiene que terminar de cumplir una condena en la provincia de Buenos Aires por un “robo calificado por uso de arma”. Sólo Rodríguez Lalus dejó la cárcel y en las próximas horas emprenderá viaje de regreso a la Capital Federal.

Además de la jueza Saslavsky, intervinieron en el proceso oral y público el fiscal Francisco Márquez, el abogado Eduardo Luis Rodríguez y la secretaria Gabriela Sanz.