Hoy egresarán 18 personas que realizaron su tratamiento en la Casa Esperanza de la Asociación Nazareth en Villa María. Es el número más alto desde que funciona la entidad en la ciudad.
Así lo reveló ayer a la mañana, en conferencia de prensa, la directora de la institución, Verónica Valentín.
El acto de graduación se hará desde las 21 en el Salón Católico ubicado en la primera cuadra de calle Estados Unidos, a metros de la iglesia Catedral.
Mirtha, la mamá de uno de los chicos que fueron tratados aquí, y Patricia, una mujer que logró escapar con mucho esfuerzo del infierno de las drogas, estuvieron presentes en la rueda de prensa. También lo hizo Vanesa López, del equipo de la entidad.
En la ceremonia prevista para esta noche los ahora ex pacientes contarán su experiencia sobre la enfermedad, la recuperación y la reinserción.
“A veces la sociedad te cierra las puertas por haber sido adicto”, advirtió Patricia.
Valentín indicó que ésta es la cifra más alta de personas que reciben el alta y que esto ocurre “porque el año pasado logramos la autogestión y nos abrimos a una población más amplia”.
Eso motivó un aumento en la cantidad de pacientes atendidos. Por eso, de 30 tratamientos se saltó a 60 que lo hacen en la actualidad, un número preocupante y que refleja la penetración de las drogas en la sociedad, un drama al que no escapa ningún sector ni clase social.
“Pudiendo sostener el equipo técnico se sostiene ese crecimiento de la demanda. Y por eso hay que darles las gracias a las obras sociales y a la Universidad Nacional de Villa María”, recalcó Valentín.
De acuerdo a lo que dijo, la casa de altos estudios brinda controles gratuitos y controles clínicos a quienes llegan a esta entidad. También les suelen proveer viandas sin costo para quienes no tienen recursos suficientes.
Por su lado, el Gobierno de la provincia continúa ausente.
Consultada por este matutino, la directiva de la casa confirmó que el Estado sigue sin enviar el dinero correspondiente a las becas de la Senaf. “No hubo ningún pago, además ninguna ayuda en alimentos y ni siquiera una computadora de las que otorga en algunos lados”, expresó.
Momento especial
Se estima que esta noche será muy especial para quienes lograron el alta en esta entidad. Cabe consignar que algunos continuarán con una supervisión externa.
Dos de las 18 personas son mujeres, el resto son hombres. Van de los 16 a los 48 años, siendo el promedio de edad los 30.
El 80% está inserto laboralmente y algunos también en lo educativo.
El programa intensivo dura entre nueve meses y un año. Algunos llegan a ser tratados durante dos años. En esta promoción iba a haber 22 graduados, pero cuatro no pudieron cumplir todos los objetivos.
Valentín llamó a los empresarios a colaborar con la institución, ya que necesitan aportes para llevar adelante esta majestuosa tarea.