Son horas raras para la familia de Juan Cruz Suppo en Villa Nueva. Por un lado, tienen las mejores expectativas sobre los resultados de los ocho implantes de células madre que ha recibido el niño en China. Por el otro, presentan la incertidumbre y la amargura porque el pequeño de 12 años no pudo salir del país asiático para regresar a la Argentina, lo que estaba previsto para el jueves pasado, por errores en la documentación. Y el chico, junto a su mamá y su tía, debió volver al hospital y está a la espera de lo que hagan las respectivas embajadas.
Raúl Suppo, su papá, indicó a EL DIARIO ayer que el nene “está mejor” y “tiene cambios”, pero que espera verlo personalmente para asegurarlo. “Los que lo han visto, lo han visto más alto, más derecho y cambió su forma de mirar”, añadió.
“En este momento estamos preocupados por las pocas respuestas del Consulado de allá, que no está haciendo prácticamente nada. Estamos viendo, por intermedio del Gobierno de la Nación a través de Carlos Zannini (el villanovense que es secretario de Legal y Técnica de la Presidencia) de agilizar la cuestión. Según la Embajada china, hicieron mal la documentación acá”, precisó Suppo.
Cuando se aprestaba a volver al país, Juan Cruz fue controlado y allí se detectó que la Visa, que debía ser para 40 días, había sido efectuada para 30. “Acá en Ezeiza no se dieron cuenta cuando salieron de Argentina y allá cuando llegaron, tampoco. Así, hoy hay dos mujeres y un chico discapacitado que están retenidos sin que se nos den soluciones”, manifestó Suppo, quien es funcionario del área de Deporte del Gobierno de Guillermo Cavagnero.
Su hijo ha vuelto al hospital en el que se le hizo el tratamiento, cuenta con escaso dinero y hasta el martes “tiene asegurado el alojamiento pero no la comida”. Y serán multados por la aerolínea.
“En los pasajes están bien discriminados los días y horarios de vuelo de regreso, por lo que realmente no puedo comprender lo que está pasando”, contó el padre del chico.