Alumni fue superior pero no pudo ganar. El 0 a 0 frente a Tiro Federal dejó algo más conforme desde lo futbolístico, ya que hizo figura al arquero Carlos Bossio. Fue anoche, en Plaza Ocampo, por la 14ta. fecha de la Zona Norte del Torneo Argentino A.
No disgustó. No se fue insultado. Y hasta pudo haberlo ganado sustentando el resultado en una superioridad concreta. Más allá de seguir sin poder ganar en la ciudad, el sabor que dejó el punto se aprecia algo más dulce a los agrios antecedentes recientes.
El balance general deja al conjunto que dirigió interinamente Gustavo Miranda mejor parado, porque Alumni fue superior prácticamente durante 70 minutos. Una mitad de cancha sólida, una delantera algo intermitente, y una defensa desprolija e insegura, fueron suficientes para lo escaso que propuso el conjunto visitante.
El amanecer del partido desnudó las falencias defensivas con las que Alumni conviviría a lo largo de todo el encuentro, porque a los 2 minutos, Ignacio Amarilla le quiso ceder una pelota a Basabe que llegó a puntear el solitario Ulises Morán y sacó Berardo a un metro de la línea de gol.
Más allá de ese sobresalto, el local fue dueño de la pelota durante los primeros 25 minutos. En ese lapso, Aimar, López y Herrera rotaban y se encontraban con pases cortos constantemente para generar situaciones como el mano a mano que “Falucho” desperdició a los 8´ tirando la pelota apenas a centímetros del segundo palo.
Lo mejor de la visita llegó arrimándose la media hora de juego y duró hasta el final de la primera etapa. Tiro Federal consiguió cortar todos los circuitos ofensivos que había mostrado Alumni hasta ese momento y lo limitó a utilizar el pelotazo y los centros desde mitad de cancha como única vía para seguir buscando el gol. Monopolizó la mitad de la cancha con Avila y Hereñú y en ese pasaje fue también donde se observó con mayor facilidad el grave problema que significó Morán para Berardo y Amarilla. Ninguno, durante todo el partido, logró frenar al grandote tanto de espaldas como frente al arco. Así y todo, Alumni se las arregló para que Basabe no tuviera demasiado trabajo.
Lo peor había pasado. La segunda etapa encontró a Alumni con tiempos y espacios por doquier en las inmediaciones del círculo central. Tiro Federal replegó contra su propio arco la línea de defensores y volantes, aisló a sus delanteros, forjó un cerrojo defensivo y se limitó a jugar de contra. Entre Aimar, Altuna y la creciente figura de Aldecoa, se pasaron la pelota constantemente buscando a los delanteros en una zona totalmente congestionada sin demasiado éxito. Lo tuvo Herrera a los 18´, pero su remate dio en una de las tantas piernas que se interponían en el camino al arco. Estuvo cerca Aldeoa a los 37´ con un remate de unos 40 metros que durmió Bossio. Y lo pudo haber ganado Aimar, cuando a los 39´ se metió al área con pelota dominada pero no pudo superar la gigante figura del arquero visitante que, por si fuera poco, también le tapó el rebote a López.
El rival, con muy poco de lo que mostró ofensivamente, logró inquietar y exigir una última línea defensiva de reacciones paquidérmicas: una jugada de contragolpe a los 20´ que la agarró mal parada, pero que tuvo la excelente intervención de Basabe para contener el cabezazo de Morán y el oportunismo de Berardo para sacar en la línea el rebote que Corochiari había empujado. Y un tiro libre que Leclerq rozó en el ángulo y que había derivado de las tantas infracciones cometidas sobre el final.
Alumni no pudo convertir los goles que justificó futbolísticamente, pero la sensación es que logró saldar al menos una pequeña parte de la gran deuda que mantiene cada vez que juega frente a su gente.
El árbitro
Correcta tarea de Marcos Bocci. Casi no cometió grandes errores y pasó desapercibido. Mucho para lo que se acostumbra a ver en la categoría.
La figura
Gran parte de la responsabilidad de que Alumni no pudiera salir del cero fue de Carlos Bossio. “Chiquito” tuvo intervenciones que resultaron claves para frustrar las posibilidades de convertir del local. En Alumni no hubo quien sobresaliera individualmente, pero si fue importante el aporte de Mariano Aldeoa en el segundo tiempo.