La pasada semana se presentó el libro “Soltando amarras. Claves para comprender la historia pendiente de la enfermería argentina”.
Con dicho acto, se clausuró el Ciclo de Jornadas de Enfermería y Salud Mental 2012, organizado por el anexo villamariense del Instituto Superior “Ramón Carillo” en el salón de la Clínica de la Familia.
Participaron también en esta actividad científica Fernando Ceballos y Olga Moyano Clúa, la coordinadora Fabiana González, los docentes Pablo Arriaga y Gabriela Cicardini, así como Julio Tabares, coordinador del ciclo. El ciclo recibió el auspicio de Grupo Roentgen.
Entre otros, se hallaban presentes miembros del Hospital Emilio Vidal Abal de Oliva y de la clínica que fue sede del encuentro.
En el libro que se presentó, su autora Beatriz Morrone plantea el problema que genera la socialización de la enfermería desde los valores, las creencias, los conocimientos, los mitos y los prejuicios en la historia argentina, desde la colonia hasta la última dictadura militar, haciendo un análisis sobre el presente. El trabajo construye puentes para entender cómo y por qué este colectivo invisibiliza la participación política partidaria de sus integrantes, la militancia y la resistencia en los gobiernos dictatoriales, sus desaparecidos, la participación y secuelas de la guerra de Malvinas, la lucha por el poder -tanto en el ejercicio como en la formación- disfrazando sus errores en la debilidad que dicen padecer por las decisiones de "otros”.
Hace un planteo explicitando la inscripción ideológica que redujo momentos fundamentales para el avance de la profesión y visibiliza los hitos de mayor construcción de fortaleza intraprofesional.
Al resaltar la importancia del texto, Tabares dijo a EL DIARIO que "Soltando..." debería ser material de lectura para cualquier enfermero, ya que ese profesional es quien más tiempo pasa con el paciente. Actualmente está muy presionado por distintas razones y no disfruta su tarea. Quien no disfruta su trabajo termina cansándose y rechazándolo. Así es como en Rosario, un 40% de los enfermeros y enfermeras está con carpeta médica", dijo.