En búsqueda de terminar de armar el plantel para el inicio de la pretemporada y con los dos refuerzos confirmados, la dirigencia de Alumni avanzó en las gestiones para la continuidad del central uruguayo Ignacio Amarilla, quien llegaría a la ciudad la próxima semana y se sumaría al trabajo.
Luego de las tratativas del vicepresidente Aureliano Sánchez y el director deportivo, Adrián Arzeno, Alumni llegó a un principio de acuerdo con el representante de Amarilla, que pugnaba para que le cumplieran un acuerdo pactado en su momento con la Unidad de Gestión.
El representante del defensor reclamaba por un pago que se comprometió a cumplir la mencionada Unidad y, por lo tanto, el uruguayo estaba lejos de volver al club, donde había finalizado su vínculo contractual. Sin embargo, en las últimas horas se avanzó para el regreso del jugador y podría sumarse el martes al inicio de la pretemporada.
Mientras, el entrenador Héctor Arzubialde también espera por el arribo del delantero Matías Espíndola -el segundo refuerzo- quien tiene previsto llegar también el martes para firmar su vínculo y comenzar los entrenamientos.
Vale recordar que el primer refuerzo es el atacante Walter Cuevas, que sigue practicando con el plantel.
Por otra parte, el presidente Sergio Hidalgo y Arzeno se comunicaron con el delantero Federico Amaya para solucionar la deuda que la directiva mantenía con él tras su partida. Es por ello que hubo un acuerdo entre las partes.
Asoma Antonino
El volante villamariense Luciano Antonino, quien se encontraba jugando el Argentino B para Jorge Newbery de Comodoro Rivadavia, será el tercer refuerzo de Alumni si finalmente la institución recibe la autorización para cubrir otro cupo, tras la lesión del santiagueño Hugo Yocca.
Antonino, quien surgió de Alumni y pasó por Gimnasia y Tiro de Salta, tuvo una buena temporada en el Argentino B, con grandes actuaciones, y por ello fue bien considerado por el cuerpo técnico, que lo conoce por haberlo dirigido en el club villamariense durante el proceso anterior.
Consultado por EL DIARIO sobre la situación, Antonino, quien se encuentra de vacaciones en la ciudad y ayer fue a ver la final entre Argentino y Atlético Ticino, reconoció que tuvo contactos con los hermanos Arzubialde y que espera con ansias la oportunidad.
"Ojalá se me dé; es lo que uno está buscando porque hace mucho que no estoy en mi ciudad y sería muy bueno volver a jugar en Alumni", afirmó el villamariense, quien en su momento surgió como una promesa interesante del club.
Con 24 años, el villamariense ya está curtido en el ascenso: jugó en Gimnasia y Tiro de Salta (club con el que ascendió al Argentino A junto al villamariense Sebastián Godoy) y lleva dos temporadas de Argentino B en la entidad sureña, donde fue figura.
"La verdad que me fue bien, hice siete goles y jugué todos los partidos, casi siempre como volante por la derecha", contó el propio jugador, que fue compañero de Fernando Guzmán en la mencionada entidad chubutense.
Alumni ya presentó todos los elementos ante el Consejo Federal para recibir la autorización correspondiente a un tercer refuerzo. Es que, amparándose en el reglamento, se puede reemplazar a un jugador de la lista si se comprueba que este cuenta con un largo período de inhabilitación por lesión.
Claro que, para sustituir a Yocca, en este caso, Alumni tiene que reforzarse con un jugador del mismo puesto. Ahí asoma Antonino, un joven villamariense que debió pelearla en otros clubes, ya sabe lo que es vestir la casaca de Alumni y está a punto de volver con la cabeza en alto.