La aplicación de agroquímicos es un tema sensible en la opinión pública. Pero, en los últimos meses, como lo fue indicando EL DIARIO rural, en Villa María se están llevando adelante distintas instancias, ya sea de capacitación u organización de los actores de la cadena (municipios, productores, aplicadores e ingenieros agrónomos) con el compromiso de asegurar una aplicación responsable de agroquímicos.
En este sentido, para ampliar sobre la legislación local sobre la utilización de estos productos y cómo se está trabajando al respecto, Pablo Montalvo, asesor fitosanitario del área de Coordinación de Políticas Ambientales de la Municipalidad de Villa María, conversó con este suplemento.
"La Ordenanza Municipal Nº 6.118, la cual fue sancionada en agosto del año 2009, adhiere a la Ley Provincial de Agroquímicos 9.164. La legislación local no sólo adhiere a la Ley Provincial, sino que es más estricta porque establece una zona de resguardo ambiental de 200 metros, donde no se puede agregar ningún tipo de agroquímicos y fertilizantes", explicó.
También, la Ordenanza, en la "zona de resguardo" no permite el depósito de bidones vacíos, el lavado de ningún tipo de maquinaria y tampoco el tránsito de maquinaria cargada de agroquímicos o que esté sucia de haber utilizado agroquímicos. "Fuera de lo que es el área de resguardo ambiental y hasta una zona de 1.500 metros se permiten las fumigaciones terrestres y las clases toxicológica 3 y 4, productos conocidos como los de banda azul y verde. A partir de los 1.500 metros se permiten las clases 1 y 2, que son las más toxicológicas", precisó.
"El aéreo no se utiliza porque existe un mayor riesgo de deriva"
Con respecto a la aplicación aérea en el ejido correspondiente a Villa María, aclaró que no se utiliza porque "existe un mayor riesgo con la deriva, el aéreo se utiliza sobre todo cuando el cultivo está avanzado y no se lo puede pisar con una máquina terrestre porque produce mucho daño y pérdida".
En tanto, Montalvo fue contundente en relación al trabajo del asesor fitosanitario. "Para hacer la aplicación se deben recibir los servicios de un asesor fitosanitario, que es un ingeniero agrónomo que realizó el curso de un año de asesor y es quien hará la respectiva receta".
Además, "este asesor recorre el establecimiento y ve qué tipo de malezas tiene y va a buscar qué producto utilizar dentro de la clase toxicológica y de qué dosificación tiene que ser la aplicación, y de ese modo evitar realizar aplicaciones innecesarias", remarcó.
Dicha receta fitosanitaria es recibida por el municipio 48 horas antes de realizar la aplicación donde, si cumple con las disposiciones legales, se le otorga una nota de habilitación para realizar la aplicación. "Hay un plazo lógico de aprobación, porque en el momento de hacer la aplicación podemos tener vientos fuertes, direccionados hacia la población. Ante esta situación, se da aviso que la aplicación no se realizó y que será en los días siguientes cuando las condiciones lo permitan. Si pasó un mes, se vuelve a presentar la receta, porque en ese mes ha cambiado la situación del lote respecto a malezas y a plagas, y así tendrá que usar otro tipo de producto o dosis", comentó.
La receta fitosanitaria viene adjuntada con la habilitación correspondiente de la máquina pulverizadora y el carné habilitante del conductor de esa máquina, que es otorgado por el Ministerio de Agricultura de la provincia de Córdoba. "En el caso de alguna infracción, se multa con unidades de nafta súper al precio actual en el momento de la infracción. Las multas al principio son más leves y si se van reiterando, son con mayor gravedad".
Hay un punto que es claro en la legislación sobre la aplicación de agroquímicos, que considera que los vecinos tienen la facultad de parar la aplicación, llamar a un ingeniero privado o tomar una muestra de la máquina si lo consideran necesario.
"Las repercusiones han sido buenas, se ha tomado conciencia, mucho mejor que años atrás, incluso actualmente mucho mejor que al comienzo de sancionada la Ordenanza. Llevó un tiempo, pero todos los eslabones de la cadena están con conciencia y haciendo las cosas de manera responsable", afirmó el asesor fitosanitario de la Municipalidad de Villa María.
En este sentido, resaltó: "No hay que demonizar al agroquímico, porque es un medicamento que, bajo las indicaciones de profesionales como son los ingenieros agrónomos, no es riesgoso".
“Denuncias por desconocimiento"
Consultado sobre si el municipio recibió denuncias respecto a las aplicaciones de agroquímicos, reconoció que "generalmente son por desconocimiento, porque ven la máquina. En esos casos se le muestra el carné y se les dice que la Ordenanza es más estricta que la Ley Provincial. No ha habido grandes inconvenientes, sólo llamados de algunos vecinos a los cuales se les aclaró cómo se maneja el tema".
Por último, Montalvo destacó que desde 2009, que entró en vigencia la Ordenanza sobre la aplicación de agroquímicos ,"la realización de recetas aumentó considerablemente, la época fuerte de aprobación de recetas es con el ciclo agrícola (desde la primavera hasta el otoño) y en invierno puede ser con algún lote de trigo, barbecho, porque no hay mucha ingerencia de agroquímicos".