La Asociación Bancaria nacional logró alcanzar el último jueves un acuerdo paritario que beneficiará a los empleados de bancos privados y públicos con un aumento de 1.700 pesos promedio durante el primer trimestre de este año.
En base a esta conquista gremial, Luis Juárez, secretario general de la seccional Villa María de la Asociación Bancaria, se refirió diciendo: “Estamos contentos con el acuerdo logrado, porque se consiguió más o menos lo que estábamos reclamando. Nosotros pedíamos 1.800 pesos de aumento y en total conseguimos una suba aproximada de 1.700 pesos, pero es algo normal porque siempre en una negociación se pide una cifra y después de la discusión termina saliendo una cifra menor”, a lo que añadió que “el paro realizado en diciembre pasado nos ayudó mucho para conseguir este aumento, porque fue contundente en todo el país”.
Además, Juárez dio detalles de cómo se compone dicho aumento. “De los 1.700 pesos logrados, 1.440 son remunerativos y 256 no remunerativos. La parte remunerativa se va a cobrar durante los meses de enero, febrero y marzo, mientras que la parte no remunerativa se va a percibir toda junta en marzo. Nosotros aspiramos a lograr el mejor salario posible previendo lo que va a ser la inflación durante el año en curso. Al menos hasta marzo, de no suceder algún nuevo inconveniente, la actividad será normal, sin paros”, indicó.
En base a la discusión salarial que la Asociación Bancaria establecerá durante la segunda quincena de marzo con las cámaras del sector, Juárez expresó que “pediremos más aumento porque decimos que la inflación de 2012, más los aumentos en impuestos que se han producido en los últimos meses y el incremento al Impuesto a las Ganancias van comiendo los aumentos que vamos logrando, o sea, que si pedimos un 25% de aumento y le aplicamos todos esos factores, el aumento termina siendo del 20%”.
Finalmente, el secretario general indicó otros dos puntos que también generan inquietud en los empleados bancarios. “También hemos pedido que se aumente a 12.500 pesos el mínimo no imponible para el Impuesto a las Ganancias, que actualmente está en 7.600 pesos. Cada año que pasa entra un segmento muy importante de trabajadores de menos sueldos a pagar el Impuesto a las Ganancias, porque poco o mucho los sueldos van aumentando en cada gremio y como no se aumenta el mínimo no imponible, todos los trabajadores vamos a terminar pagando este impuesto al salario”.
“Algo muy grave que también está sucediendo es que algunos sectores están reclamando para imponer el impuesto sobre las indemnizaciones. Quiere decir que a un trabajador que lo dejan cesante, encima le quieren cobrar un impuesto, incluso al que se retire del trabajo porque tenga una enfermedad. Eso es una locura, un delirio”, concluyó.