La cantante de tango y hacedora cultural Marisel Zalazar dejará nuestra ciudad para regresar a su Entre Ríos natal, no sin antes desarrollar una mini gira por la populosa ciudad brasileña de San Pablo.
Así lo comunicó recientemente a sus allegados y amigos villamarienses que han pasado a ser su “familia” postiza en los años que residiera Zalazar.
Cabe recordar que durante dos años seguidos, el espacio musical denominado Milonga Tango Show, primero en el Club Almagro, luego en el Club Agrario y en ocasiones especiales en el Prado Español, el Restaurante Edén y La Peña del Soñador.
Cada sábado ofrecía una velada de música en vivo con pasajes particulares para demostrar las destrezas coreográficas en la pista. A pesar de que regresa a la localidad entrerriana de General Ramírez para continuar con su empresa de decoración, Zalazar confiesa alejarse de Villa María con un dejo de tristeza.
“Hice todo lo que pude”
“Cada vez se me hacía más difícil hacer tango en esta ciudad. Aunque creo que brindé todo lo que pude, e hice sacrificios y esfuerzos, me estoy yendo un poco triste y con impotencia”, indicó.
“En estos años -prosiguió- los espacios para el género se fueron achicando y desde el área municipal de Cultura tampoco se ha prestado mucho interés”. “De hecho, que se haya organizado una sola velada tanguera para el mes de enero en la explanada, cuando antes eran todos los domingos, certifica lo que digo. Incluso, no es algo que se me ocurre a mí sola sino que es compartida por otros músicos”, subrayó.
Asimismo, también apuntó a que dentro del circuito tanguero local evidenció rupturas que “no beneficiaban a nadie”.
Un disco para el recuerdo
No obstante, Marisel recibió una interesante propuesta de actuar en diferentes hoteles 5 estrellas de San Pablo. “Hay muchas posibilidades para ir a trabajar afuera, te pagan y te tratan bien. Acá, y en toda la Argentina es así, no pasa lo mismo”.
Previo a su viaje con destino a Brasil, la cantante desea terminar de grabar su segundo disco en nuestra ciudad.
Junto a músicos y colegas como Miguel Albri, Oscar Bravín y Mario Bustos, Zalazar editará en el estudio de Ricardo Fonseca, “Chamuyando tangos”, una suerte de continuación de “Diciendo tangos”. “El disco contaría entre 12 a 14 temas, ya hemos terminado siete. Aunque no será para venderlo sino para tenerlo como un recuerdo de mi paso por Villa María y de tener tan buenos amigos”.