Apenas el cronista lanza la pregunta, Rosana toma carrera y prepara su respuesta fundada sobre cualquier tema a tratar.
En una reciente entrevista con EL DIARIO, la destacada cantautora española adelanta parte del show que brindará en la primera noche del Festival de Peñas y además reflexiona sobre un planeta cada vez más hostil y “menos humano”.
-¿Cómo viene la gira?
-Ahora estamos haciendo la parte de Argentina que todavía no habíamos llegado. En la etapa anterior hicimos 40 conciertos de Ushuaia hasta el norte.
-¿Conocés el Festival donde vas a actuar?
-Podría mentirte, pero prefiero decirte la verdad, no lo conozco, aunque me han hablado muy bien de él.
-¿Qué vas a hacer sobre el escenario?
-Va a ser una mezcla de mis 15 años de carrera, repasando un poco de cada disco. Y de la puesta será una banda pequeña, con tres músicos (bajista, guitarras y batería), con un concepto más rockero que otra cosa.
-¿Cómo es eso?
-Será una puesta intermedia entre un show enérgico y divertido y el otro que siempre manejamos para espectáculos audiovisuales preparados para espacios muy abiertos.
-En los conciertos solés hablar entre temas. ¿Tiene que ver con alguna tradición heredada de trovadores?
-En realidad yo no sigo un guión y soy un desastre (risas). Pero por supuesto que me ciño a un repertorio hilado, porque si no es así, me matan los músicos y el técnico de luces. De todos modos procuraremos que sea lo más interactivo posible.
Anhelos y utopías
-En declaraciones, expresaste que el mensaje de tu disco lleva como anhelo "nacer una nueva esperanza, un mundo más humano"
-Es un poco el resultado de lo que espero y deseo de verdad. Realmente que sea un mundo diferente, que se parezca mucho más a eso que uno ha llamado utopía, que nunca sabremos si se puede hacer realidad si no nos ponemos manos de obra.
-¿Ese pensamiento te liga con alguna religiosidad en especial?
-Me liga directamente con el corazón del mundo, en general. Cuando nos podemos poner por delante de la profesión de cada uno, no nos diferenciamos tanto. Somos parecidos para hacernos tanto daño. Pero hemos colaborado con cosas que no nos hacen bien.
-¿De qué manera seguís la grave situación en España?
-Es cierto que España lo está pasando mal, pero, si hay algo que me ha dado esta gira, es poder comprobar que en muchas partes lo están pasando mal. Hay una fragilidad que es desesperadamente universal. Y lo que más me ha preocupado de mi tierra es ver a la gente desesperanzada, que es una sensación que supera a la tristeza.
-Al tema "Llegaremos a tiempo" lo cantaste en el programa "678" de Canal 7. ¿Significó un aval para el Gobierno argentino?
-No tiene nada que ver. El tema se ha usado también para la salida de los mineros y fue versionada por un colegio de sordomudos que se hizo en lengua de señas. La idea es la misma de lo que hablaba recién. Mi anhelo es poder disparar una canción y que se derrumbara alguna desesperanza.