Probablemente el tono de lo que se conoció como "art-rock" de los 70 haya sido capitalizado por Roxy Music, cuya vigencia como tal se prolongó entre 1970 y 1983. Gran parte de la responsabilidad de que esto haya sido así, le cupo a su líder y natural mentor Bryan Ferry (nacido en 1945), director, conductor e ideólogo del concepto del grupo hasta el punto tal de devorarlo y prolongarlo con su propio nombre.
De este modo, entonces, el resto de los integrantes de la banda pasó a ser automáticamente un grupo de acompañamiento del jefe de lo que se inició como un quinteto. Completaban el staff: Brian Eno, Phil Manzanera, Andy Mackay y Paul Thompson.
Planteada la estrategia, Ferry se topó con su primer clásico de "art-rock", el tema conocido como "Virginia Plain", que alcanzó las principales listas de éxitos en 1972. El protagonista principal de Roxy Music pretendió imponer la idea de que los discos simples jamás fuesen incluidos en los álbumes, pero este criterio finalmente no prosperó. El modelo Roxy funcionó en la vieja Europa, pero para los americanos del Norte pasó inadvertido, a pesar de que con la ayuda de los Jethro Tull, los apadrinados por Ferry completaron una gira a finales del 72 por los Estados Unidos. El ego de Ferry no tardó en asomar y en 1974 se ponía a la venta su primer álbum en calidad de solista titulado "These foolish things" (Estas cosas tontas), una colección del pop y del rock, desde Dylan hasta los Stones, pasando por los grandes artistas del Motown. Al final, este maduro rocker grabó un cover que logró un buen golpe en el mercado discográfico, versionando el tema de Bob Dylan "Knocking on heaven’s door" ("Golpeando a las puertas del cielo"), incluido en la banda de sonido de la película "Pat Garrett and Billy the Kid", dirigida por Sam Peckinpah.