Los agencieros de Villa María y las localidades de la región abonaron ayer alrededor de 400 mil pesos en premios, según datos extraoficiales de la Lotería de Córdoba.
Esto fue para abonar todos los premios a las personas que acertaron los números que salieron anteayer en las quinielas de Córdoba, de Buenos Aires y la Nacional.
Cabe señalar que llamativamente, el miércoles, día de la elección del Papa, en la Nacional salió en primer lugar el número 40, que significa, en el “lenguaje quinielero”, el cura. Y más sorprendente aún fue el número que salió a la cabeza de la Quiniela de Buenos Aires, que fue el 88, que representa al mismísimo Papa.
Esto convirtió a ambos números en favoritos, es decir, a los más jugados para los sorteos vespertinos y nocturnos.
Por esa razón, Lotería de Córdoba debió abonar más dinero en premios que lo habitual. Si bien no hay estimaciones oficiales, los funcionarios de esa dependencia indicaron que lo pagado ayer es más del doble del promedio, aunque no tanto como cuando salen los favoritos de siempre, como el 48.
Además, al salir dos cifras de los favoritos, el valor no es tan significativo como cuando el más jugado es un número de cuatro cifras.
Favoritos que quedan
La mayoría que se inspiró en la elección del Papa argentino para tentar a la suerte en los juegos de azar, eligió el 76, la edad de Jorge Bergoglio, ahora Francisco. Ese número que todavía no salió (hasta la matutina de ayer) por lo que sigue encabezando las preferencias.
Pero ese extraño lenguaje que asocia las palabras a los números, parece un listado de supermercado para una familia numerosa, por lo extenso de las opciones.
Recorriendo agencias y consultando con asiduos jugadores de la Quiniela, nos informaron sobre los números “que faltan” para salir tras la elección papal.
Uno es el 8832, que es una cifra integrada por el 88, que significa el Papa y el 32, que representa a la palabra “argentino”.
Pero también hacen asociaciones de números con nombres. Según esta forma de interpretación, el nombre Jorge, tiene un equivalente en el 910 y Francisco, en el 082.
Por otra parte, Bergoglio es el Papa 226, otro número que aún no figura en las pizarras de las agencias; como así también el 115, que fue la cantidad de cardenales que eligió al Pontífice.
Evidentemente que la elección del jefe de la Iglesia Católica, no debería tener nada que ver con los juegos de azar; pero es innegable, a juzgar por el incremento de los premios, que mucha gente asocia la espiritualidad con las expectativas de suerte y por las dudas, apuesta.