Un joven domiciliado en la ciudad de Oliva fue condenado ayer a tres años de prisión de ejecución condicional, luego de que confesara haber cometido una decena de delitos desde mediados de 2010 hasta octubre pasado.
Se trata de Leandro Martín Pericón, de 25 años de edad, quien recibió así su primera sanción penal durante una audiencia oral y pública sustanciada en la Cámara del Crimen de Villa María, en el marco de un juicio de trámite abreviado.
Pericón, nacido el 7 de junio de 1987, fue declarado autor responsable de “hurto reiterado” (tres hechos), “robo”, “resistencia a la autoridad”, “lesiones leves reiteradas” (tres hechos) y “amenazas reiteradas” (dos hechos), por diferentes ilícitos perpetrados durante el transcurso de 2010, 2011 y 2012, en jurisdicción de Oliva.
Por ser la primera condena que se le impone, la misma fue aplicada en suspenso, circunstancia que le permitió a Pericón recuperar la libertad ni bien concluyó el debate. Asimismo, el tribunal dispuso que el joven convicto cumpla algunas de las reglas de conducta establecidas en el artículo 27 bis del Código Penal de la Nación, como “fijar residencia”, “abstenerse de usar estupefacientes o de abusar de bebidas alcohólicas”, “someterse a un tratamiento médico o psicológico” y “adoptar oficio, arte, industria o profesión, adecuado a su capacidad”, entre otras medidas.
El juicio fue presidido por la camarista Silvia Saslavsky de Camandone y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y del abogado Manuel Antonio Toledo (radicado en Oliva, pero oriundo de James Craik), mientras que la secretaria actuante fue Gabriela Sanz.