Los conciertos que ofreció Elvis Presley a partir de finales de la década del 60, tras tomarse un período sabático que duró nada menos que ocho años, alcanzaron su punto crítico durante enero de 1973, cuando ofreció un espectáculo en vivo de una hora de duración.
Esta aparición de "el rey del rock" se llevó a cabo en Honolulu, en lo que mundialmente se conoce como el famoso "International Center Arena". No sólo brindó un show para un público compuesto por miles de personas que presenciaban a Elvis en vivo, sino que además como era previsible, el concierto del natural de Tupelo (Mississippi), fue retransmitido a todo el mundo vía satélite para una audiencia estimada en un millón de televidentes de diversas geografías. Para cuando el espectáculo tuvo lugar, el sello discográfico RCA ya había recibido millones de peticiones de copias del doble disco que sería producto de esa presentación en vivo. Al momento de su lanzamiento oficial, un mes después, el larga duración titulado "Aloha From Hawaii" se convirtió en el primer disco de Elvis desde el conocido como "Roustabout" de 1964, en llegar al Nº 1 de los 100 mejores de los Estados Unidos sustituyendo a "Dark side of the moon" (El lado oscuro de la luna) de Pink Floyd, para una semana después ceder a su vez el puesto a "Houses of the holly" de los Led Zeppelin. La grabación rescata a Presley en su mejor momento en directo, interpretando clásicos favoritos del público como "Hound dog" (Perro feroz) y "Blue suede shoes" (Zapatos de gamuza azul), además de algunos más modernos en el tiempo como "Burning love" (Amor ardiente). El long play del Rey vendió cinco millones de copias y fue puesto a la venta en febrero de 1973.