Fin de año es para nosotros los realizadores sólo un pequeño descanso para recargar energías y para replantear lo que hemos hecho en este tiempo. Este año nos dejó un balance positivo en cuanto a las producciones audiovisuales en la Villa. La carrera Diseño y Producción Audiovisual de la UNVM nos brindó muy buenas producciones de manos de sus flamantes egresados; en el mes de agosto, un grupo de jóvenes villamarienses participaron en el rodaje de un cortometraje en 16 mm, "Orillas", cuya producción estuvo a cargo de jóvenes de Perú, Ecuador, Colombia, y Argentina. Este año también se llevaron a cabo realizaciones que aún no vieron la luz, como el caso de "Ballas – una historia de caminos" de Sergio Stocchero, y "Ajuste de Cuentas", producción a cargo de DyG realizaciones; pero sin dudas la figura estelar de este 2008 fue el largometraje de jóvenes villamarienses "RR – la cosecha amarga", de Martín Gruttadauria, que recibió galardones en diferentes lugares del mundo, como en el caso de Cuba, Dinamarca, además de Argentina. Este año que culmina nos dejó gratas satisfacciones, pero la apuesta es a que en el año que comienza, cualquier objetivo cumplido hoy, se duplique. Robinson Ríos DyG Realizaciones (productora audiovisual) El año 2008 fue para mí un año atípico, no pude sentarme y analizar mucho sobre lo que globalmente estaba pasando en nuestra ciudad. Ahora, finalizando puedo ver que el arte, como desde sus orígenes, no para de nacer y crecer, de forjarse y salir al mundo, donde cada vez hay más posibilidades para actores, músicos, artistas plásticos, escritores, fotógrafos, etcétera. El problema radica en el espectador, lector, destinatario villamariense que no puede, tal vez por una cuestión cultural, valorar dicho arte, dichas expresiones, y que busca fuera o que no busca, el hecho artístico, porque lo de acá le parece mediocre sólo porque se hace acá, sólo porque con esa gente se cruza en la panadería o en el centro todos los días. Esa es la pena que siento, y lo negativo de mi balance. A los artistas, villamarienses, de la zona, que conviven día a día en nuestra ciudad, mi saludo y Chapeaux (Chapó). Roxana Sella - Tallerista de Teatro
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