Cien niños le celebraron ayer el cumpleaños número 47 a una casa que los cobija a diario. Es el Centro de Promoción Familiar Ramón J. Cárcano de barrio Nicolás Avellaneda, el que funciona en el Centro Integrador Comunitario ubicado en calle Salta y La Quiaca.
A media mañana comenzó el festejo, al que acudió EL DIARIO.
Su coordinadora, Edith Oscarez, explicó que aquí se realizan diversas actividades, como distintos talleres y apoyo escolar.
Hay folclore, educación física, taller de alimentación, arte y se dan clases como apoyo a los estudios escolares de Nivel Primario de los pequeños.
La población está compuesta “por cien niños de barrios Felipe Botta, Nicolás Avellaneda y San Nicolás”, según precisó y añadió que el número se mantiene con el correr de los años.
Afortunadamente, hay retención y no dejan de asistir. “Si alguno se cambia de casa, inmediatamente llamamos a quienes le siguen en lista de espera, ya que hay un grupo que no puede venir porque no tenemos más lugar”, develó.
La docente destacó que algunos talleres “son extensivos a padres y a la comunidad”, valorando ese espacio.
Precisamente, el llegar a la familia es su mayor preocupación, según confesó ante la pregunta de este cronista. “Nuestra idea es llegar al grupo familiar. Lograr que lo que se les brinde le sirva para trabajar, generar hábitos y responsabilidades”, declaró.
La coordinadora afirmó que la máxima demanda pasa por el apoyo escolar, sobre todo de las clases de matemática y lengua.
“El contenido es general, pero la problemática más importante pasa por esas asignaturas”, especificó.
“Los niños y niñas sienten que éste es su lugar y eso es sumamente valioso”, resaltó.
Ante los interrogantes de este matutino, dijo que por lo general los papás de los pequeños trabajan, tanto la madre como el padre, aunque hay muchas mamás solas. Las labores que tienen son changas, empleo doméstico “y los menos son los que están en blanco”.
Valoró que los alumnos sean receptivos a lo que les enseña.
“Los conocimientos son adquiridos en la escuela, nosotros buscamos, sobre todo, trabajar en el fortalecimiento de su autoestima y en la independencia de cada uno”, explicó. “Sí, su autoestima está herida”, confirmó.
Dos turnos
El Centro está abierto de 7 a 18 horas y funciona en dos turnos.
Los mismos son de 8 a 12 y de 13.30 a 15.
Hay 13 personas en el plantel y la idea es trabajar mucho desde lo lúdico, buscando cultivarles distintas características a los nenes a través del juego.