Ayer por la mañana se instaló en la esquina del Instituto Rivadavia uno de los "Arboles de la vida" que ha ideado el Archivo Provincial de la Memoria en homenaje simbólico a los detenidos-desaparecidos, en el marco del desarrollo del juicio por la megacausa sobre el terrorismo en Córdoba.
En la ocasión, los miembros del establecimiento, arribados desde Córdoba, realizaron la intervención urbana en tributo a Ester Felipe (psicóloga) y Luis Mónaco (periodista), quienes fueron secuestrados en nuestra ciudad por el Tercer Cuerpo del Ejército en la madrugada del 11 de enero de 1978, cuando ninguno de los dos superaba los 28 años.
Su hija, que apenas tenía 25 días de vida, fue criada por sus abuelos maternos. Paula Mónaco Felipe, quien ayer se encontraba en el acto con su propio retoño en sus brazos, reside actualmente en México donde también vive su tía, la reconocida cantante Liliana Felipe.
En diálogo con los medios, Paula recordó que su madre había asistido a dicho colegio y remarcó la enseñanza recibida: "El Rivadavia fue fundamental en su vida, ya que fue muy feliz y contó con la educación revolucionaria de Antonio Sobral".
En relación a las desapariciones de sus padres, precisó que "no se trata del tema de un grupo de familias, sino de toda la sociedad. Mientras no podamos saber qué sucedió y no tengamos los responsables frente a la Justicia, tendremos siempre esa deuda pendiente. Vale decir que todos fuimos víctimas del terrorismo de Estado".
“Un testimonio importante”
Consultada sobre el reciente testimonio del vecino José Solanille en la megacausa de La Perla (que engloba los casos de dicho centro de detención junto a La Ribera y el D-2), resaltó: "Es un aporte muy importante ya que nadie puede decir que estaba de un lado o de otro, por ello su palabra es inobjetable. Es un parteaguas, ya que por primera vez desde la sociedad civil alguien se anima a testimoniar y a dar datos precisos de lo que vio y sucedió".
En el mismo orden, señaló: "Tal testimonio encamina a la Justicia a la posibilidad de saber que hubo muertos y hubo enterramientos. Sólo falta que la Justicia acelere sus procedimientos". Respecto a la necesidad de encontrar los cuerpos de sus padres, añadió: "Una sociedad que no entierra a sus muertos no cierra el ciclo de la vida y no tiene un sentido de civilidad real".
En cuanto a las diversas actividades que se desarrollan en homenaje a los desaparecidos en todo el país, apuntó: "Me da mucha alegría que ello suceda porque, como lo que hacemos hoy, no es lavarse en el pasado, no es vivir atrás, no es estar dolido y pensar en venganza, sino que significa sembrar; como este árbol".
Participantes. En el acto, también se encontraban Elvio Toscano (miembro de APDH), representantes de la Biblioteca Rivadavia, Graciela Taquela (psicóloga y colega de Ester Felipe), familiares de desaparecidos, miembros del Archivo de la Memoria (María Cristina, Natalia Magrín, Carla de la Fuente y María Laura Villa) y el director del Espacio La Perla, Emiliano Fessia.
Teatro
Tras el acto, la Biblioteca Bernardino Rivadavia invitó a los presentes a participar de la obra realizada por el grupo Teatro por la Identidad de Córdoba, que se montó en el auditorio Sobral ante alumnos del ciclo orientado.