Parece que se está cultivando un “Orestito” Berta en Villa María. Se trata del joven Francisco Morante, de Laboulaye, que vino a la ciudad para estudiar la Tecnicatura en Mecatrónica (que dicta la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Villa María), pero el tipo es un inquieto y hacedor. “La idea de poner el motor a la bici surgió hace un tiempo atrás, siempre me gustó experimentar con cosas y meter mano”, contó. 

Y siguió diciendo: “En enero de este año empecé a investigar por Internet y conseguí comprar los insumos en Buenos Aires, porque acá en Córdoba no encontré. Entonces me mandaron todas las piezas, pero no el instructivo con el armado”.

Al mismo tiempo que se metió de lleno en la colocación del motor de 48 centímestro cúbicos (cc) 2 tiempos en su mountain bike negra, comenzó el cursillo de Ingeniería Mecánica que también ofrece la UTN. “Estuve trabajando en las concesionarias locales de Honda y de Volkswagen.  Ahí conocí más de motores y de la parte electrónica. Además, como me quedaba lejos ir a trabajar fue que pensé en ponerle motor a la bici”, recordó.

Hasta estos días, Francisco armó dos bicis con motor, pero la primera fue para él. 

“A la mía la armé en seis horas y a la segunda, que es de mi hermano fue en tres horas. No lleva mucho tiempo, se reniega en la puesta a punto, soy quisquilloso y no me gusta que quede algo que después joda”, aclaró. 

 

La técnica

 

La primera bici con motor tiene estas características: motor de 48 cc 2 tiempos, monocilíndrico, refrigerado por aire, potencia de 2 HP, 5.000 r/m, embrague a fricción con grasa, posee full rodamientos, arranque a pedal, modo de ignición con CDI, tipo de combustible nafta súper y aceite sintético/semi sintético 2T.

En tanto, el segundo prototipo de Morante tiene otras particularidades: motor de 65 cc, 2 tiempos, monocilíndrico, refrigerado por aire, potencia de 2.5 HP, 5.000 r/m, embrague a fricción con grasa, posee full rodamiento, arranque a pedal, modo de ignición CDI, tipo de combustible nafta súper 90 Oc, aceite sintético/semi sintético 2T, relación de compresión 6:1, relación de transmisión 18/1, capacidad del tanque dos litros, capacidad máxima de carga 150 kg.

“Hay cosas que se pueden mejorar, porque tienen un tensor fijo y se puede hacer uno autoregulable, para que a medida que estires la cadena se vaya acomodando solo. Tengo más ideas, pero hay que llevarlas al papel para ver si se pueden concretar”, adelantó.

Una de sus intenciones es darle más potencia al motor, “pero hay que ver un montón de cosas, porque dos tiempos y no quema toda la nafta. Por eso, quiero ver de recuperar esos gases y volverlos a mandar, lo cual sería más económico”, indicó. “Y creo que la contaminación es menor que un motor de cuatro tiempos. La idea de mejorar la potencia es para que reaccione más, porque es igual que una Zanella, la acelerás y demora un ratito en salir, pero una vez que salió tiene una buena velocidad,  en los bulevares voy a la par de los autos”, afirmó riéndose. 

 

Otra vez bici

 

La bici con motor también tiene la opción de volver a su función original de tracción a sangre. “El otro día fui a probar la bici de mi hermano y me quedé sin nafta, me tuve que volver pedaleando. No cambia mucho el peso y podés poner los cambios”. 

Sobre algunas modificaciones que hizo entre el primer y segundo modelo, puntualizó: “En la mía usé los mismos manillares que tenía la bicicleta, pero la otra tiene un sistema que apretás un embrague y tiene una trabita, donde la bajás y queda apretada la traba, entonces gira libre la rueda y vas pedaleando como una bicicleta normal”.

 

“La gente la pide” 

 

“Mucha gente que me ve en la calle me para y me pregunta. De gasto de insumos tengo 1.300 pesos y ahora le puse precio a mi trabajo, aunque no tenía esa idea, pero tengo las herramientas para armar. Todo el sistema cuesta 1.800 pesos”, precisó.

 En este sentido, agregó: “Por ahí tenés que ver el estado de la bici y que la usen bien, porque es motor dos tiempos y si le meten nafta sola va andar igual, pero no va a tener la misma vida útil si se utiliza el combustible que no va, es importante la preparación que lleva la nafta”.

En un litro de nafta se deben colocar 50 mililitros de aceite. “Está el aceite sintético o semisintético, pero ese no se usa, porque deja muchos residuos en el cilindro. Si le meten más aceite que el que va se pone más pesada la nafta, se empasta la bujía y suceden una serie de cosas más”, sostuvo. 

“En estos motores pasa lo mismo que cuando comprás una moto o un auto, donde te dicen hasta que no hagas mil kilómetros no lo pases de tal velocidad para que el motor se vaya asentando, esto es igual. Con cinco tanques, que serían más o menos 500 kilómetros estaría asentándose el motor, por lo cual se va reduciendo el porcentaje  de aceite que se utiliza para la mezcla hasta que queda la mezcla normal. Así, el motor queda más suelto, tiene más reacción, porque la nafta queda más explosiva”, subrayó.

 

Alarma

 

Las dos bicis con motor armadas por Francisco tienen un sistema de alarma que descubrió por YouTube. “ A la bici la dejo en la facultad y no pasa nada, pero voy a un quiosco y tengo que estar poniendo el candado, en vez con la alarma si te la mueven suena. Vino un amigo de mi hermano que tiene una moto y le gustó, para ponerla en su moto. Además, al código lo adaptás cómo querés y tiene para poder configurar la sensibilidad”, describió.

 

-¿Cuál es tu sueño?

-Ahora, la idea es poder fabricar motores en Villa María, porque tengo algo de idea con la otra carrera que hice (Mecatrónica) de poder manejar un torno y de elegir el material para poder fabricarlos. Tenés que tener la plata para hacerlo, pero eso me gustaría un montón, porque en Argentina no se fabrican, vienen todos de China. Acá se podrían hacer más baratos y podés mejorar los errores que tienen. 

Para aquel que quiera hacer consultas o le interese tener su bici con motor, se pueden comunicar a: francisco@moranteweb.com.ar o en www.facebook.com/Motorcycles.VM