Uno es obrero, pese a que el entonces arzobispo de Córdoba, Raúl Primatesta, le dijo que dejara su trabajo en el taller mecánico porque era incompatible con su labor de cura. “Yo le dije que prefería vivir de mi trabajo antes que cobrarle a la gente”, cuenta Lucio Olmos, uno de los autores del libro “Cinco Curas”. Otro, Adrián Vitali, se enamoró y redescubrió la sexualidad que llevaba reprimida y que tanto daño le hacía. Un tercero, Nicolás Alessio, opinó como cura que no estaba mal el matrimonio igualitario. Ellos, junto a Elvio Alberione y Horacio Fábregas (fue quien estuvo más cerca del poder de la Iglesia y el único que perdió la fe), cuentan sus historias en el libro que presentaron anoche en el Instituto de Extensión de la Universidad Nacional de Villa María (foto).
El libro “Cinco curas” consiste en sus vidas envueltas en la historia del país en diferentes épocas y en la historia de la Iglesia que, como institución, tiene aspectos conflictivos. “El libro pretende romper el muro de silencio levantado en torno a las complicidades de la Iglesia con los militares, con el poder económico, con el ocultamiento de los curas pederastas”, dijo Alessio.
La charla lleva al camino del Papa Francisco, por lo que les preguntamos si aguardan cambios profundos en la institución durante este Pontificado. “Bergoglio tiene una historia política acomodaticia con el poder, por más que tenga gestos cercanos a la pobreza. Puede ayudar a cambiar algo, por ejemplo, la situación financiera del Vaticano, pero no cambios profundos”, como el sacerdocio femenino o el fin del celibato obligatorio para los curas, dijo Alberioni.
Creen que tras un papado liderado por un alemán (Benedicto), “eligieron uno con imagen más cálida y de Latinoamérica, que es el único continente en el que hay mayoría católica”.
Carta de Alessio al Papa
Nicolás Alessio perdió su condición de sacerdote por decisión del anterior Papa, ante los cuestionamientos recibidos por su apoyo al matrimonio igualitario. Sabe que Francisco puede revocar tal decisión, aunque no es un tema que le preocupa.
“No voy a presentar ningún recurso, sólo estoy preparando una carta, que haré pública, en la que le escribiré mi mirada acerca de la homosexualidad”, diferente a la del Vaticano, “porque los dos fuimos parte del debate que se dio en la Argentina sobre el tema”.
Además, cuestionará los procesos que realiza la institución contra los sacerdotes “rebeldes”.