La historia del cantautor, motoquero y montañista madrileño que actuará esta noche en Meroi (Mariano Moreno y Buenos Aires) desde las 23, es, al menos, para una película. Comenzó cantando sus temas en los tempranos 90 con amigos y colegas en la banda Crónicas Nocturnas, luego se postuló como solista con “El príncipe marrón”, hasta que un productor de discos le coartara su explosión como artista, valiéndose de la letra chica del contrato. Años después, la música dejó de dar réditos y se “montó a un taxi”. Viendo el vaso medio lleno, comenzó a registrar fotográficamente la capital española desde el asiento del conductor, cuyo resultado arrojó un libro y una muestra titulada “Madrid, licencia para mirar”, que llegara a las pantallas de Europa por su peculiaridad. Angel Saguar, que llegara por primera vez a Argentina la semana pasada, arribó a Villa María escapándose de la crisis de su país, sólo por haber recibido en Facebook varios mensajes de Lilian Sarmiento que quería “importarlo” para recitales en vivo. “Vengo a recoger sensaciones”, acotó con genuina alma de aventurero.