El sábado pasado se llevó a cabo una nueva velada del café literario denominado "Mentiras que valen la pena", en el café Sión, sobre bulevar Alvear. El espacio, coordinado por los escritores Griselda Rulfo y Andrés Velo, viene desarrollando interesantes y destacadas veladas artísticas multidisciplinarias, donde se combinan la poesía, la música y hasta el arte plástico.
Dentro del reducto, colmado de público, Griselda inició la jornada convocando a los asistentes a una lectura a micrófono abierto de poesía propia. Por allí desfilaron escritores reconocidos (como Susana Zazzetti, Eduardo Cichy y María Elena Tolosa) y varios aficionados de diferentes edades. Luego, se dio espacio a la presentación del exquisito libro "Andamios de pan" de la escritora Claudia Tejeda de Alta Gracia. Se trataba de su tercera obra editada y dedicada a su padre albañil y a su madre, hacedora de panes. Luego, llegó el turno del artista y performer Nicolás Walker de Pozo del Molle quien comentó sobre su obra "personalista" inspirada en peces y su trabajo en confección de atuendos extravagantes, como el que exhibía en su cuerpo.
El último tramo contó con la imponente actuación de la narradora oral Alicia Perrig y el guitarrista Pablo Chudnovsky, que cerró con variado repertorio. La artista, por su cuenta, implementó un "menú" de historias a narrar, donde el público podía escoger en "pequeños bocaditos", "entradas", "plato principal", "postre" y "bombones". En esta ocasión recreó, entre otros, textos de Walter Rago, Cortázar, Galeano y Manuel Mujica Lainez (una memorable interpretación de "La pulsera de cascabeles").
Juan Ramón Seia