Las cámaras de seguridad de un modesto hotel de Villa María permitieron identificar a dos delincuentes que asaltaron y golpearon al dueño de dicho albergue y se convirtieron en prueba concluyente para que los condenaran en un juicio oral y público sustanciado ayer en la Cámara del Crimen local.
Sin posibilidad de coartada, los albañiles Jorge Daniel Agout, de 31 años de edad, y Carlos Alzugaray, de 28, confesaron haber intervenido en el hecho perpetrado en horas de la madrugada del 23 de diciembre de 2011, cuando ingresaron armados al Apart Hotel Sarmiento, ubicado en bulevar Sarmiento 1951 de esta ciudad, donde sorprendieron a Eduardo Pedernera, quien oficiaba de conserje en la Administración.
Tras recudirlo bajo amenazas de muerte, los delincuentes golpearon a Pedernera en la cabeza y otras partes del cuerpo y lo despojaron de unos 1.500 pesos en efectivo y un teléfono celular, luego de lo cual se dieron a la fuga.
Sin embargo, no advirtieron que en el ingreso al local había un par de cámaras de vigilancia, que registraron la entrada y la salida de ambos sujetos y sus rostros quedaron grabados con total claridad en el sistema de seguridad.
Este elemento de prueba fue más que suficiente para individualizar a los asaltantes y, posteriormente, lograr su detención, lo que se produjo algunas semanas más tarde.
Agout, domiciliado en barrio Lamadrid, recibió una condena de cinco años de prisión, mientras que a Alzugaray, afincado en barrio San Martín, se le impuso una pena de cuatro años y seis meses, en ambos casos tras ser declarados coautores de “robo calificado por uso de arma de fuego” cuya operatividad no se pudo acreditar.
El juicio fue presidido por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Márquez y de la asesora letrada Silvina Muñoz (ejerció la Defensa de los dos acusados), mientras que el secretario actuante fue Roberto Jue.
Cabe agregar que como consecuencia de la agresión, Pedernera debió ser socorrido por personal del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, que lo trasladó al Hospital Regional Pasteur para su mejor atención.
En tanto, al momento de declararse culpables durante la audiencia de la víspera, ambos sujetos manifestaron que el asalto estaba relacionado con un “ajuste de cuentas” con el dueño del hotel, aunque por circunstancias que no trascendieron.