Una mujer fue asaltada el domingo pasado dentro del cementerio “La Piedad” por un desconocido que la hizo caer al suelo y se apoderó de sus pertenencias, según denunció ayer ante EL DIARIO.

Adriana Griselda Moral concurrió ese día, en horas de la tarde, a la necrópolis local, en compañía de una amiga, pero al quedar sola fue sorprendida por un individuo que le arrebató y destruyó la cartera, despojándola, entre otros objetos, de una importante cantidad de dinero.

 

El hecho

 

De acuerdo a lo relatado por Moral, el domingo pasado fue, junto a una amiga, al campo santo situado en barrio General Roca, con la intención de visitar a familiares que están sepultados en el lugar.

“Recuerdo que era, más o menos, a la misma hora que estaban jugando el partido (en referencia a Boca-River) y entramos por la parte donde están los panteones (la puerta antigua), fuimos hasta la rotonda que hay allí y luego llegamos al sector del panteón de la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos”.

Una vez en el lugar, le pidió a su acompañante que fuese a buscar agua “para dejar unas flores”. Ante el alejamiento momentáneo de su amiga, “me subí un par de escalones de la escalera para alcanzar el nicho y fue ahí donde alguien, que no alcancé a ver, me tironeó la cartera que llevaba colgada del hombro”.

Sin embargo, el desconocido no pudo apropiarse de la cartera, por lo que en un segundo intento “tiró más fuerte, se cortó una de las manijas y me hizo caer de la escalera”.

Moral apuntó que, “por entonces, ya no sabía lo que hacía; sé que grité porque mi amiga volvió rápido pensando que me había caído de la escalera, pero fue terrible…”.

La mujer refirió que el atacante “destrozó la cartera para llevarse lo que tenía adentro” y lamentó sobremanera el dinero que le quitó, “porque era una cantidad importante, que no quise dejar en casa, y sobre todo porque lo necesito”.

La denunciante, asimismo, señaló que no alcanzó a ver nada y sospechó que “es alguien que podría haber estado escondido entre los panteones.

Por otro lado, aseguró que el actor del robo no sólo le provocó lesiones al “tirarme al suelo, sino que sentí algo en la espalda y tuve mucho miedo de que fuera un revólver o que me apuñalara con un cuchillo”.

Poco después, ya con la presencia de otras personas, ocasionales concurrentes al cementerio, “llegó la Policía, me quisieron llevar en una ambulancia al Hospital (Pasteur), pero no quisimos dejar solo el auto en el que habíamos ido con mi amiga”.

Moral también dio cuenta de que, aún en el lugar del atraco, “el encargado del cementerio dijo que, casi con seguridad, se  trata de alguien que salta la tapia del fondo y aprovecha para robarles a los que van de visita, por lo que aconsejó a que las mujeres no vayan con carteras o bolsos”.

La atribulada vecina, quien no efectuó la denuncia y que aseguró que tampoco la invitaron a hacerla los uniformados que acudieron ante la emergencia, fue asistida poco después en el Hospital Regional Pasteur, “donde incluso me hicieron una placa radiográfica”, aunque no quedó internada.