Se lanzó ayer el sexto año de la campaña villamariense “Un trato x el Buen Trato”, la que se erigió en modelo en el país y fue replicada luego en distintos lugares.
Hasta agosto inclusive, la iniciativa estará centrada en efectuar una capacitación en las distintas escuelas de la ciudad, para luego ya sí iniciar la vacunación simbólica. Nora Landart y Graciela de Celis (de AMMA - Oñativia y Comunidad y Cambio, respectivamente), quienes encabezaron el encuentro con los medios de comunicación y son las impulsoras de la misma, precisaron que desde el inicio de la misma se capacitaron a más de 3 mil jóvenes y se practicaron 22.500 vacunas.
Se busca, de esta manera, promover la cultura del buen trato y es una campaña de sensibilización de chicos hacia los adultos, con la idea de que quien ha sido capacitado este año, se sume luego al proyecto.
Hay tres ejes centrales: la desnaturalización de la violencia, la comunicación asertiva y la resolución pacífica de conflictos. El segundo “es un taller que disfrutan mucho y en el que dejan en evidencia liderazgos negativos y el cómo esos líderes se dan con el consentimiento de todos, por miedo de los demás a ser víctimas de maltrato”.
Landart valoró que todos los que forman parte de la campaña “trabajan voluntariamente” y aseguró que se han ido alcanzando los objetivos. Asimismo, precisó que localidades de la región se fueron sumando, como Arroyo Cabral y Etruria o, el año pasado, Ticino.
A la hora de hablar de las problemáticas que surgen en los colegios, confirmaron que el año pasado se percibió que algunos jóvenes filman sus peleas. No obstante, Graciela de Celis fue categórica: “En mi época había pandillas, esto siempre existió, había peleas. Lo que ahora ocurre es que se da una visibilidad a estas cuestiones y es vivido como un reality”.
Explicaron que conocen que el acoso escolar se ha ido incrementando “notablemente”, aunque apuntaron que la información proviene de organizaciones no gubernamentales o de investigaciones realizadas por centros de estudios, ya que no hay datos oficiales.
Todas las escuelas han sido invitadas a abrir sus puertas para el proceso de capacitación.
Consultados sobre si difieren las problemáticas detectadas en ámbitos públicos en relación a los privados, de Celis sostuvo que “las manifestaciones son las mismas, pero las causas pueden ser diferentes”. Landart, en este aspecto, advirtió que los jóvenes que presentan disposición de recursos económicos “suelen encontrar más contención” profesional.
“Los chicos encuentran en esta campaña un espacio seguro y eso es importante. Se requieren ámbitos como estos para que ellos puedan hablar”, recalcó Landart, quien enfatizó: “El maltrato y el abuso no diferencia clases sociales”.
