El camarista René Gandarillas le impuso ayer una condena de 12 años de prisión a un vecino de Arroyo Algodón por la violación y embarazo de una menor de su entorno familiar, que además padece un retraso mental.
Ramón Elvio Cáceres, de 62 años de edad, fue declarado autor responsable de los delitos de “abuso sexual con acceso carnal, agravado por el vínculo”, en concurso ideal con “corrupción de menores”, y estará en la cárcel -como mínimo- durante los próximos siete años.
En la tercera y última audiencia de debate, Cáceres tuvo la oportunidad de expresarse en la instancia conocida como “última palabra”, y poco después el juez Gandarillas dictó sentencia, imponiendo la misma pena que el fiscal Francisco Márquez había requerido en su alegato del viernes pasado.
Como se trata de un convicto primario, habida cuenta que no posee antecedentes penales, el sexagenario podrá solicitar la “libertad condicional” cuando complete las dos terceras partes de la condena (es decir, ocho años), pero para que se le conceda dicho beneficio excarcelatorio no sólo deberá observar buena conducta durante todo el período de detención, sino que además será sometido a una exhaustiva y minuciosa pericia psicológica.
14 meses preso
Detenido desde el 13 de marzo de 2012, en principio Cáceres tendrá que permanecer tras las rejas hasta mediados de marzo de 2020 (para entonces tendrá 69 años) y, recién al llegar esa fecha, la Justicia deberá evaluar si está en condiciones de reinsertarse socialmente, para lo cual se considerará su conducta carcelaria y el resultado que arroje aquella pericia psicológica que se le realizará a tal efecto.
Salvo la lectura de la parte resolutiva de la sentencia, que se llevó a cabo en audiencia pública, el juicio se realizó a puertas cerradas, no sólo por tratarse de un hecho de instancia privada, sino que, además, tuvo como víctima a una menor de edad.
Cáceres fue apresado pocos días después que la madre de la criatura lo acusara ante las autoridades de haber violado y embarazado a la menor, que al momento del hecho tenía 13 años.
Cuando una médica del Hospital Pasteur la revisó y advirtió que se hallaba embarazada, se constató que llevaba 14 semanas de gestación, por lo que el abuso se cometió durante los primeros días de diciembre de 2011 en la vivienda que Cáceres ocupaba en calle Córdoba sin número de Arroyo Algodón.
Cabe recordar que este sórdido caso derivó en el primer aborto no punible realizado en la provincia de Córdoba (se practicó a fines de mayo de 2012 en la Maternidad Provincial), luego de un histórico fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sobre los alcances del artículo 86 del Código Penal, que establece que no será castigada la interrupción de un embarazo producto de una violación, y que no es necesario el pedido de autorización por parte de los médicos.