La obesidad y la pérdida de peso son factores de riesgo importantes en el desarrollo de cálculos biliares. El principal factor de riesgo nutricional en el desarrollo de cálculos biliares es la obesidad. Otros factores son el colesterol sérico y los niveles de triglicéridos, excesiva y desbalanceada ingesta calórica, períodos de ayuno de más de ocho horas, dietas hipocalóricas de menos de 700 kcal/día, especialmente en sujetos obesos y nutrición parenteral por períodos mayores a las dos semanas.
Los mecanismos responsables, permanecen aún desconocidos. Muchos estudios han demostrado que las mujeres que presentan un índice de masa corporal (BMI) de 30 ó más, tienen, al menos, doble probabilidad de desarrollar cálculos biliares, que las mujeres con un índice de masa corporal menor a 25. Es importante añadir, que cuanto más obesa sea una persona, mayor riesgo tendrá de desarrollar cálculos biliares.
Todavía no esta claro por qué la obesidad implica un riesgo mayor en la formación de estos cálculos, pero los investigadores creen que en los obesos, el hígado produce una cantidad muy elevada de colesterol; es este exceso de colesterol el que produce la sobresaturación en la vesícula biliar.
Los cálculos biliares, son una de las más importantes complicaciones médicas de la pérdida de peso rápida y en forma voluntaria. Las dietas muy bajas en calorías son las principales responsables (Se considera comúnmente que una dieta es muy baja en calorías cuando se ingieren 800 kcal o menos a lo largo del día, los alimentos son predominantemente líquidos y la dieta se practica, aproximadamente, por un período de 12 - 16 semanas). Varios estudios han demostrado que entre 10%-15 % de los obesos que estaban practicando este tipo de dietas, muy bajas en calorías, desarrollaron cálculos biliares. Otro gran estudio mostró que las mujeres que habían perdido de 5 - 10 kg de peso (en un período de dos años), tuvieron 44% más probabilidad de desarrollar cálculos que las que habían conservado estable su peso. Las que habían perdido más de 10 kg de peso tuvieron casi el doble de probabilidad de desarrollar cálculos.
Los investigadores creen que una de las causas de esto podría ser que al hacer dieta, cambian las concentraciones de colesterol y sales biliares en la vesícula. Mientras aumenta la concentración del colesterol, se reduce la de sales biliares. Además de esto, los hábitos comunes entre los que practican este tipo de dietas, de hacer ayunos, saltear comidas ( por ejemplo, el desayuno) hacen decrecer las contracciones de la vesícula, que si no vacía regularmente su contenido, probablemente facilite la formación de cálculos.
Sin embargo, en un estudio, en el que se prescribió una dieta de 1200 kcal/d (5025kj/d), con alimentos regulares y 20g/d de lípidos (15 % de las kcal), por un período de 16 semanas, no se observó una alta tasa de formación de cálculos biliares en pacientes moderadamente obesos.
Dr. Cristian Aimale
Cirujano General
Matrícula 30742
Policonsultorios AMEL