Señor director:
Me dirijo a la gente a través de EL DIARIO para hacerle saber sobre el comportamiento de algunos policías de la calle General Paz.
Yo tuve en guarda a mi hijo Hugo Zabala, hasta que fuera trasladado a Bell Ville por un problema neurológico.
Me quiero referir en especial a la agente Karina Calderón, por su falta de respeto hacia las personas. El uniforme le queda grande a esta señorita.
Y también quiero señalar al agente César Zabala y al sargento primero Jorge Peralta. El día martes 23 de diciembre llevaron a mi hijo a Córdoba a hacerle una pericia y, a la vuelta, estos jóvenes que estaban de guardia no le pasaron ni el desayuno ni la merienda. Tampoco se merecen el puesto que tienen.
Destaco sí la colaboración de los cabos Hurtado y Moreno. Son policías con todos los honores. Y deseo que Dios los bendiga.
Desde ya, muchas gracias y aprovecho para saludarlos con mi respeto.

Elba Mansilla
DNI 4656265